La vivienda en propiedad puede ser una fuente de ingresos para la jubilación. La hipoteca inversa es un producto financiero nuevo en España, pero de largo recorrido y éxito en países como el Reino Unido. Unos 150 gallegos de más de 65 años ya la han suscrito y los expertos consideran que su implantación en la comunidad irá creciendo con el tiempo. Durante 2009, se han contratado 2.700 hipotecas de estas características en toda España, un 8% más que hace un año. El importe medio de las viviendas que sirven de avalistas a la renta se sitúa en los 350.000 euros.

La hipoteca inversa es un préstamo con garantía hipotecaria que está dirigido a personas de más de 65 años o dependientes. Con ella se consigue percibir una renta mensual sin perder la propiedad de la vivienda. Una vez fallecido el titular, los herederos pueden recuperar la propiedad reingresando el importe de las cuotas devengadas por la entidad financiera con un interés que ronda el 6%.

Las cuotas dependen de la edad del titular y del valor de la vivienda hipotecada. Por ejemplo, un hombre de 75 años y cuya vivienda esté tasada en 450.000 euros recibiría una cantidad mensual de 1.206,90 euros al mes, aunque esta cantidad puede variar en función de los tipos de interés disponibles en cada momento en el mercado financiero [ver cuadro adjunto].

El vigués Ángel Rodríguez-Carreño de Cominges, es el consejero delegado de Óptima Mayores, la primera consultora en este tipo de operaciones que existe en España y pronostica un fuerte crecimiento de este producto para los próximos quince años. En un reciente informe elaborado por esta firma se señala que el colectivo de mayores de 65 años será el 58,69% de la población española en 2050, mientras que la media europea se situará en el 50,46%. Con este panorama, la compañía considera que la hipoteca inversa será una de las soluciones posibles al problema que se pueda plantear en el sistema de pensiones.

En Galicia la hipoteca inversa está entrando a duras penas por el sentido de la propiedad de los gallegos. Es en las grandes capitales donde existen más personas dispuestas a contratar este sistema, sólo Madrid agrupa al 51% de los potenciales clientes. La edad media de los propietarios que acceden a contratar este producto es de 75-76 años, entre los que predominan las mujeres.

El año del lanzamiento

Rodríguez-Carreño señala que 2010 puede ser el año del lanzamiento masivo de este producto, ya que el Gobierno está a punto de promulgar el Reglamento que establezca las condiciones, formas y requisitos con la que ha de prestarse el asesoramiento independiente que regula, entre otras condiciones la hipoteca inversa. En diciembre de 2007 se promulgó la Ley de Reforma del Mercado Hipotecario que regula la hipoteca inversa y fija la obligatoriedad de un asesor independiente de las entidades financieras, como son las consultorías. Sin embargo, en aquel momento se postergó a una normativa futura su funcionamiento y las condiciones que bancos y cajas han de suministrar ese asesoramiento independiente a sus clientes.

A fecha de hoy, más de dos años después, sigue sin aprobarse esa normativa esencial que impulsaría el crecimiento de este producto financiero ya que, entre otras ventajas, las cuotas de las hipotecas inversas no son consideradas rentas positivas sujetas al IRPF como sí lo están las rentas procedentes del seguro diferido de rentas vitalicias vinculado a la operación de préstamos por rendimiento de capital inmobiliario, aunque con un coeficiente reductor.

Pero el argumento que para Óptima más pesa para la implantación de la hipoteca inversa es el incierto futuro del Régimen de la Seguridad Social en España, sobre todo teniendo encuentra el paulatino envejecimiento de la población. "Hay que tener en cuenta que el sistema se basa en el reparto de cotizaciones que ingresan las nóminas de los trabajadores entre las personas con derecho a percibir estas prestaciones", advierte la firma.

Un informe de Óptima señala que 2009 ha sido "un buen año para la hipoteca inversa puesto que la crisis inmobiliaria y financiara le han afectado positivamente". Pero el principal argumento del éxito es la necesidad de los mayores de disponer de ingresos complementarios a su pensión, tanto de jubilación como de viudedad.

"Muchas personas acceden a la hipoteca inversa antes de malvender su vivienda debido al deterioro del mercado", explican desde Óptima.

Los agentes de hipotecas inversas reclaman ahora al gobierno que establezca definitivamente un marco jurídico estable para que las entidades financieras y los asesores independientes, además de los propios cliente, sepan en que terreno de juego se encuentran.