Sólo el 20% de los pesqueros gallegos obligados desde el pasado 1 de enero a utilizar el Diario Electrónico de A Bordo (DEA) para la notificación de sus capturas tienen los equipos necesarios instalados. Así lo afirman los armadores gallegos, que critican la "improvisación" del Ministerio de Medio Marino a la hora de cumplir con la normativa comunitaria.

Los empresarios de la pesca de Galicia aseguran que únicamente uno de cada cinco buques de más de 24 metros de eslora cuenta con los dispositivos del diario electrónico y muchos de ellos tienen problemas con la aplicación informática que se utiliza para la transmisión de los datos o con las claves de acceso al sistema, que debe proporcionarles la Secretaría General del Mar.

Mientras, un 30% de los buques está todavía a la espera de que les lleguen los equipos pues "la falta de previsión" ha provocado que las compañías autorizadas para su venta e instalación "no den abasto" en los trabajos de activación de los dispositivos –un proceso para el que se requiere "bastante tiempo"– en el plazo establecido por la normativa española y comunitaria.

El otro 50% de los pesqueros ni siquiera han solicitado los equipos porque han optado por la alternativa de enviar los datos a través de correo electrónico, un sistema más caro pero que no requiere la instalación de nuevos dispositivos –de un precio cercano a los 5.000 euros–. Esta opción, según los armadores, tampoco escapa a los problemas relacionados con la clave que debe proporcionar el Gobierno.

El sector ya había expresado a finales del año pasado su temor a posibles sanciones en aguas de otros países por el mal funcionamiento de los equipos y el retraso en su instalación, a lo que el Gobierno ha respondido que ya solicitó a estados como Portugal, Francia, Reino Unido o Irlanda un periodo transitorio en el que los barcos puedan simultanear las comunicaciones a través del diario electrónico con la información en papel. El acuerdo no escrito supondría una moratoria hasta el 31 de marzo en las inspecciones relacionadas con el nuevo sistema de transmisión de datos y se sustenta en que muchos otros países se encuentran en la misma situación que España.

"Lo malo es que no tenemos ninguna garantía y parece que el Gobierno portugués es el único que ha confirmado hasta el momento que no sancionará por este motivo", explicó ayer el presidente de la Asociación de Armadores de Buques de Pesca de A Coruña (Arpesco), Jesús Etchevers.

"Nos gustaría tener algo desde el punto de vista jurídico que nos diese seguridad, para protegernos en caso de que se produzca cualquier multa o arresto en nuestras aguas o en el exterior, pero no tenemos ningún documento que nos ampare", sentenció la gerente de la Asociación de Espaderos Guardeses, Conchi Ortega.

La patronal pesquera Cepesca solicitó que el Consejo de Ministros de Pesca de diciembre estudiase la posibilidad de dar una moratoria para la aplicación del nuevo sistema ante el retraso generalizado en los países de la UE pero el asunto ni se abordó. Ahora los armadores lamentan que, como la nueva norma de control fue aprobada por los ministros de Pesca de los Veintisiete, la CE no puede modificar el reglamento y habría que esperar a la siguiente reunión de los Estados miembros.

En toda España hay alrededor de unos 700 buques de pesca de más de 24 metros de eslora obligados a tener el Diario Electrónico de A Bordo pero a partir de julio de 2011 deberán contar con el también los de entre 15 y 24 metros y desde el 1 de enero de 2012 los barcos de 12 a 15 metros.

Los problemas registrados hasta el momento por la lentitud en la entrega, gestión e instalación de los equipos en los barcos hacen prever al sector que la situación se repetirá en los próximos años, complicando la actividad de los armadores y la de los buques tanto en aguas españolas como comunitarias.