El Ministerio de Industria ha confirmado la renovación del Plan de Competitividad del Sector del Automóvil el próximo año, petición compartida por las empresas y los sindicatos para dar continuidad a los proyectos iniciados en 2009. El departamento que dirige Miguel Sebastián no ha concretado aún la partida que se distribuirá entre fabricantes e industria auxiliar, aunque fuentes de este sector en Galicia confirman que será de 400 millones de euros, la mitad que este año.

Las empresas gallegas del motor recibieron en el segundo trimestre del año 88,4 millones de euros del plan de Industria, casi dos veces menos que las compañías de Cataluña, que fue la comunidad autónoma más beneficiada: se llevó 225 del total de 800 millones repartidos por el Gobierno. En total, la automoción gallega, con la factoría viguesa de PSA Peugeot Citroën a la cabeza, había presentado cuarenta proyectos industriales al Plan de Competitividad, con una inversión global de 315 millones de euros.

De esas solicitudes, el Ministerio aceptó finalmente dieciséis, que contaron con una ayuda de 88,4 millones (10,1 millones en concepto de subvenciones directas, y 78,3 como créditos a tipo de interés cero). La factoría de Balaídos se llevó la mayor parte de los fondos, 71,5 millones de euros, y su panel de proveedores, 16,8 millones. El sector había tildado de "decepcionantes" las partidas por el peso que esta industria tiene en el PIB de Galicia.

Aprobación

Pese a las críticas sobre la cuantía recibida, la automoción gallega consideraba imprescindible la renovación de este plan en 2010 para reforzar los proyectos industriales que se han puesto en marcha, por lo que ha calificado de "buena noticia" el anuncio de Industria. "Lo importante es que se refuercen esas inversiones, por lo que tendremos que movernos", explican fuentes del sector en relación a la caída de la partida presupuestaria de 800 millones a 400.

Sólo el plan industrial de PSA Peugeot Citroën hasta 2012 contempla una inversión de 1.062 millones de euros y la fabricación de dos nuevos modelos. En su caso, el centro de Balaídos presentó dos proyectos al Gobierno, uno de los cuales era la creación del primer centro de prototipos de la multinacional gala fuera de Francia, dedicado al desarrollo de los chasis de los nuevos modelos de PSA, mientras que el segundo aborda la instalación de una plataforma modular en Vigo, infraestructura que permitirá fabricar vehículos de diferentes tamaños.

Por parte de los proveedores, recibieron ayudas multinacionales implantadas en Vigo como Grupo Copo (1,8 millones), Gestamp (4,4 millones) y Benteler (876.549 euros), entre otras. Las centrales sindicales también han valorado positivamente la ampliación de las ayudas al motor, siempre que éstas se vinculen al mantenimiento del empleo, la I+D+i y la formación.