La caída de los precios en tasa interanual es consecuencia del continuo abaratamiento del petróleo y, en menor medida, de la moderación de los precios de los alimentos y las bebidas no alcohólicas, así como de los hoteles, cafés y restaurantes.

Hace un año, el precio del barril de petróleo Brent se situaba en 102,9 dólares, y el pasado marzo estaba en el entorno de los 47 dólares, de ahí el fuerte efecto que tiene sobre la tasa interanual.