Este pronóstico contrasta con la perspectiva mucho más negativas de los economistas del sector privado, que esperan que la profunda recesión de la económica mundial perjudique a la economía oriental, ya que depende principalmente de las exportaciones a Occidente.

La oficina del Gabinete proyectó un crecimiento nominal del 0,1 por ciento para el próximo año fiscal y un retroceso del 1,3 por ciento para este año fiscal, informó hoy la agencia de noticias nipona Kyodo News.

La economía japonesa ya sufrió un retroceso en los trimestres comprendidos entre abril y junio y julio y septiembre. Sin embargo en el año fiscal 2007, la economía contabilizó una expansión del 1,9 por ciento y una ganancia nominal del 1 por ciento.

El primer ministro japonés, Taro Aso, dijo en una reunión con el gabinete ministerial que la economía nipona ha sufrido "condiciones severas" y se comprometió a implementar lo antes posible paquetes de estímulo incluidos en un presupuesto extra para proteger a la población y que formarán parte del presupuesto general del próximo año.