Agencias / Palma de Mallorca

Las aerolíneas no pasan por su mejor momento. Los despidos masivos de Spanair, que elimina nueve rutas de su oferta, podrían dejar a la compañía con sólo dos bases, en Madrid y Barcelona. Así lo aseguró hoy el Sindicato Independiente de Tripulantes de Cabina de Pasajeros de Líneas Aéreas (Sitcpla), dejando así al descubierto una situación que desde el Gobierno se observa con "preocupación", tal y como reconoció el vicepresidente económico, Pedro Solbes.

Sitcpla reveló que de las actuales siete bases operativas de Spanair podrían desaparecer las de Las Palmas, Tenerife, Bilbao, Palma de Mallorca y Málaga. Fuentes del sindicato declararon que la aerolínea "está estudiando la viabilidad de las bases, pero es muy posible que solamente deje Madrid y Barcelona", después de que la dirección no haya sabido reaccionar en ocho años a las pérdidas de los últimos ejercicios. "Sólo en uno de los últimos ocho años Spanair registró resultados positivos y la compañía ha mantenido la misma estructura de siete bases y un centro de trabajo sin adecuarse a las condiciones de mercado", afirmaron.

Ante el escenario actual, marcado por los altos precios del combustible, Spanair está "peor preparada". A juicio de Sitcpla, "tiene muchísimos costes incrementados por el mantenimiento de los aviones las bases y los costes derivados de la propia operación".

El ministro de Economía y Hacienda, aseguró que el Ejecutivo tiene la "preocupación" de que el plan de viabilidad de Spanair pueda afectar a la competitividad del sistema de transporte, en particular en la comunicación de la Península con las islas. "Lógicamente, la pérdida de una empresa debe ser considerada de forma negativa", añadió, durante la presentación de las bases del modelo de financiación autonómico, comparecencia en la que indicó que las medidas anunciadas por la aerolínea son "todavía transitorias".

Precisamente el vicepresidente del Gobierno de Canarias, el popular José Manuel Soria, reconoció que la reestructuración empresarial "va a afectar" a la conectividad de las islas con el resto de España y Europa.

La dirección de Spanair informó ayer a los sindicatos que el Expediente de Regulación de Empleo (ERE) contempla el despido de 120 pilotos, 220 tripulantes de cabina, 180 trabajadores de "handling", 120 técnicos de mantenimiento, 270 empleados de las oficinas y despachos y 150 operarios de venta al público.

El coordinador estatal de UGT en Spanair, Guillermo Villalonga, señaló que estas cifras pueden oscilar 20 trabajadores "arriba o abajo", mientras que, por otro lado, advirtió de que su sindicato "no va a aceptar" un ERE sin que previamente se apruebe un plan de viabilidad.

De este modo, avanzó que en la negociación del ERE, que comenzará a partir del 22 de julio, UGT exigirá que los 1.100 despidos anunciados por la dirección se traduzcan en jubilaciones, despidos pactados, reducciones de jornada y bajas incentivadas o negociadas.

Villalonga recordó que actualmente, Spanair cuenta con alrededor de 3.550 trabajadores, de los que 1.970 trabajan en el "handling", sector en el que UGT es el sindicato mayoritario. Por el contrario, en el Comité de Empresa de Palma UGT cuenta con tres delegados, frente a los 16 de CC OO.

No obstante, remarcó que va a intentar mantener conversaciones con CC OO, con el objetivo de que ambos sindicatos vayan "juntos y cogidos de la mano" en este asunto. Precisamente, el presidente del Comité de Empresa de Spanair, Jordi Mauri, mantiene la misma postura que UGT, respecto al plan de viabilidad, con el fin de que los despidos sean "menos traumáticos".

Así, dijo que, según cálculos internos del Comité de Empresa, unos 250 trabajadores de las islas perderán su empleo y, por otra parte, advirtió de que los sindicatos convocarán movilizaciones en caso de que detecten "trampas e intereses ocultos" por parte de la compañía.