Esta revisión de las tarifas de los servicios públicos regulares de transporte de viajeros por carretera forma parte de los acuerdos alcanzados el pasado mes de junio con las empresas del sector para hacer frente al encarecimiento del gasóleo.

La subida, que se ha hecho a cuenta de la revisión del próximo año, se suma a la del 2,79 por ciento aprobada para este año.

La Federación Nacional Empresarial de Transporte en Autobús (FENEBUS) tachó ayer de "insuficiente" la revisión tarifaria y reclamó un incrementó de, al menos, el 5 por ciento.

Según esta asociación, la revisión no alcanza para cubrir los costes de explotación del sector debido, fundamentalmente, a las escalada de precios de los carburantes.

En el último año, el gasóleo se ha incrementado un 35,4 por ciento.