En este sentido, la Dirección General de Consumo y la Dirección General de Industria, Energía y Minas, recibieron cientos de reclamaciones en las que los abonados se quejaban de cargos extra en su factura al pasar a otro tipo de cobro. Estas reclamaciones comenzaron a llegar a finales de 2007, lo que dio lugar a la apertura de un expediente a las empresas y al requerimiento de devolución del dinero, algo por lo que la Comunidad de Madrid volvió a requerir la devolución el pasado mes de abril.

De esta forma, de la mediación de la Comunidad de Madrid, según Martínez de Sola, se beneficiarán "hasta 200.000 familias en toda la región que tenían contratada tarifa nocturna con alguna de estas compañías, 76.000 con Unión Fenosa y 104.000 con Iberdrola, antes de que se anunciara su desaparición".