Una de las principales actuaciones urbanísticas de Vigo, la de la unidad de actuación de La Panificadora, está paralizada sine die por un conflicto societario entre los diversos propietarios. El juzgado de primera Instancia número 13 de Vigo dictó un auto por el que ordena el embargo preventivo de fincas en este ámbito pertenecientes de la promotora viguesa Montelouro, ante las demandas que pesan sobre los administradores de la sociedad, Félix Piñón Ríos y Dalmiro Pereiras Bande, por parte del resto de los propietarios de la parcela y por las causas que el primero tiene abiertas en el Juzgado de Instrucción número 3 de San Bartolomé de Tirajana (Las Palmas de Gran Canarias).

Este juzgado vigués decretó este embargo ante la "existencia de una cierta situación de insolvencia o precariedad que permiten inferir claramente un peligro real de no poder hacer frente a la eventual sentencia estimatoria, dada la elevada cuantía de la reclamación".

La decisión sólo afecta a las fincas de Montelouro, que ocupan la mayor parte del solar de La Panificadora y que alberga un conjunto de edificaciones situadas entre las calles Santiago de Vigo, Cachamuiña y Falperra, ya que también existen otros propietarios. En el solar de la Panificadora se prevé desde hace años una de las principales actuaciones en el centro de Vigo, que no ha prosperado por las demandas interpuestas entre los propietarios.

El solar forma parte de una Unidad de Actuación (U.A.) en el Plan Especial Casco Vello, aprobado de forma definitiva. Esta U.A. derivada de un convenio con el Concello vigués concreta el aprovechamiento de la actuación en 21.950 metros cuadrados, además de fijar la cesión de los silos de harina rehabilitados, parcelas para uso dotacional y para plaza pública y la ampliación de las calles Falperra y Rúa de Santiago.

Otros propietarios

Fuentes consultadas señalaron que "para llevar a cabo el desarrollo de la edificabilidad y las cesiones previstas se precisa que la U.A. sea de un único titular o del acuerdo unánime de los distintos propietarios que componen esta udidad", algo que por el momento está muy lejos de producirse.

Inicialmente el solar era propiedad exclusiva de la Compañía Viguesa de Panificación, aunque posteriormente los edificios se dividieron horizontalmente, apareciendo como propietario de parte de las construcciones con frente a la calle Falperra la sociedad Ganasa (Gallega de Nutrición Animal, S.A.), cuyo capital social pertenecía en un 73% a Viguesa de Panificación. Tras la quiebra y posterior suspensión de pagos de Ganasa y Viguesa de Panificación, se crea una comisión liquidadora para el pago de acreedores de los bienes de la compañía con disposición sobre "determinadas fincas" de la sociedad en ese solar.

Estos bienes fueron vendidos en documento privado en 1987 a Promociones Montelouro, mientras la escritura de compraventa se formaliza en el año 2005.

Aún cuando la promotora que preside Félix Piñón posee la mayoría del capital social de la Compañía Viguesa, existe un porcentaje significativo de su capital social en manos de accionistas particulares.

En diciembre de 2001, en un auto emitido por el juzgado de Primera Instancia número uno de Vigo por quiebra y en pago de deuda a los acreedores, se le adjudica a Vicus Gestión la propiedad e los bienes que Ganasa tenía en el solar de la Panificadora. Posteriormente estos bienes son vendidos a la compañía Invoga.

Actualmente, los propietarios de la Unidad de Actuación de la Panificadora son Invonga, poseedora de parte de los inmuebles con frente a la calle Falperra, que fueron adjudicados judicialmente en pago de deudas de Ganasa y Vicus Gestión; Promociones Montelouro, propietario de los inmuebles con frente a las calles Cachamuiña y Falperra, adquiridas a través de la comisión liquidadora a Viguesa de Panificación. Por último, las otras edificaciones que tienen frente a la calle Cachamuiña y Rúa Santiago, pertenecen a la Compañía Viguesa de Panificación.

A su vez, los administadores de Promociones Montelouro, Félix Piñón y Dalmiro Pereiras, y de Viguesa de Panificación, Félix Piñón, suscribieron un contrato de compraventa con Invoga, vendiéndole a esta firma las fincas que tenían en la Panificadora.

El proceso de embargo preventivo está relacionado con los litigios entre los distintos propietarios de la Unidad de Actuación, ante la negativa de Montelouro de Panificadora de elevar a público la venta de las fincas de Panificadora a Invoga.

A partir de aquí, Invoga interpone una querella criminal contra los administradores de Montelouro Félix Piñón y Dalmiro Pereira, que se sigue en el Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo.