Redacción/Efe / VIGO / Madrid

Un estudio realizado por la organización interprofesional del atún (Interatún) sobre la calidad de las conservas de túnidos procedentes del sudeste asiático comercializadas en la UE identifica "graves incumplimientos" de la normativa comunitaria en aspectos como el etiquetado, los parámetros de calidad físico-químicos y la evaluación sensorial de los productos.

El estudio, cofinanciado por el Ministerio de Medio Ambiente, Medio Rural y Marino, detalla que el 96% de las muestras analizadas (de un total de 50) presentaban incidencias en las menciones reflejadas en el etiquetado, como la indicación incompleta del domicilio de la empresa comercializadora o la indicación incorrecta de la denominación de venta del producto, según informó ayer Interatún.

El trabajo también destaca la existencia de desviaciones en el contenido efectivo de los productos, puesto que el 58% de las muestras estaban fuera del rango permitido respecto al peso escurrido y el 20% respecto al peso neto.

En relación con el etiquetado, entre las principales incidencias encontradas se destaca que un 58% se encontraban relacionadas con la información adicional del etiquetado (empleo de logotipos Dolphin safe no oficiales), seguida de la indicación incompleta del domicilio de la empresa comercializadora (46%) y de la indicación incorrecta de la denominación de venta del producto (el 34% no especifican el tipo de aceite utilizado).

En referencia al etiquetado de la información nutricional, 34 muestras presentaban dicha información, en las cuales se detectaron deficiencias en el 29% de las mismas empleando erróneamente las unidades o variando el orden establecido legalmente.

Los envases mostraban la denominación de venta "Atún" correctamente, ya que en todos los envases analizados contenían alguna especie de los géneros Thunnus o Katsuwonus pelamis. La especie más habitual fue Katsuwonus pelamis, presente en el 76% de las muestras.

Evaluación sensorial

En relación con la evaluación sensorial, el estudio señala que en un 2% de las muestras el aspecto fue calificado como no adecuado o no apto, mientras que, en un 10% como agradable y específico del producto.

Sobre la textura, el trabajo resalta que en un 4% de las muestras tal atributo se calificó como no adecuada o no apta, mientras que, en un 18% se valoró como agradable y específica del producto.

Respecto al sabor, en el 6% de las muestras se calificó como no adecuado o no apto.

El análisis sensorial manifiesta la existencia de deficiencias en los productos, alcanzando un porcentaje del 22% de muestras no adecuadas o no aptas respecto al indicador de calidad (Qt).

En control de peso neto, el 20% de las muestras estaban fuera del rango permitido, mientras que aproximadamente el 50% de los valores de proteínas estaban fuera del intervalo, observando desviaciones tanto positivas como negativas.

Señala el estudio también que existen incumplimientos de la normativa vigente en el 58% de las conservas procedentes del sudeste asiático en relación al peso escurrido.

Interatún considera que ante estas irregularidades es necesario el cumplimiento de la normativa comunitaria vigente para todos los productos que se comercializan en la UE, con el fin de garantizar la salud de los consumidores y de posibilitar una competencia leal en dicho mercado.