Los inversores han recibido con gran entusiasmo el descubrimiento del que podría ser uno de los mayores yacimientos de petróleo del mundo en la Cuenca de Santos en Brasil, en el Atlántico, operado por Petrobrás (45%), British Gas (30%) y Repsol YPF (25%). De momento la petrolera hispanoargentina se muestra cauta y asegura que aún no se conocen las reservas reales del yacimiento pero podría ser el mayor hallazgo en los últimos 30 años.

La publicación de un importante hallazgo de reservas petrolíferas, ha disparado hoy el valor de la petrolera Repsol. A las 9.15 horas, el Ibex subía un 1,43%, ganaba 189 puntos y se colocaba en 13.349 unidades rompiendo con la tendencia a la baja de las últimas cinco jornadas. Todo ello gracias a que las acciones de Repsol se han llegado a disparar en sus primeras horas de cotización en Bolsa un 13,6%, hasta los 26,7 euros. A lo largo de la mañana la cotización se moderó con crecimientos en el entorno del 10% y al medio día marcaba los 25,81 euros.

Hoy la propia Repsol ha querido aclarar en un comunicado remitido a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que aún no se conocen las reservas reales del yacimiento de crudo descubierto en Bacia de Santos.

Aunque las informaciones "oficiosas" apuntaban a unos 33.000 millones de barriles, hoy Repsol ha matizado haciendo referencia a un comunicado de Petrobas en el que se señala que las "informaciones más conclusivas sobre el potencial del descubrimiento sólo serán dadas a conocer después de que se complete el proceso de evaluación, y serán comunicados al mercado oportunamente".

Dos áreas de exploración

El bloque petrolifero descubierto denominado BM-S-9 se compone de dos áreas de exploración. El primer pozo fue anunciado en septiembre de 2007 y su evaluación está a punto de concluir, aunque la compañía advirtió entonces de que serían necesarias nuevas inversiones por lo prometedor del hallazgo.

La perforación del segundo pozo comenzó este pasado 22 de marzo y todavía no se ha alcanzado la capa del 'pre-sal'. Según Repsol, la continuidad de las actividades de exploración incluye la perforación de nuevos pozos, prueba de formación de larga duración y nuevos estudios geológicos que comprueben el alcance del hallazgo.

El hallazgo petrolifero es de tal magnitud que el director de la Agencia Nacional del Petróleo de Brasil, Haroldo Lima asegura que podría ser "el mayor hallazgo de crudo en los últimos 30 años" ya que calcula que podría producir unos 33.000 millones de barriles.

Expertos geólogos habían advertido que la región podría contar con gigantescos yacimientos de hidrocarburos o gas natural. Si la cuantía de la reserva se confirma, Brasil podría estar entre los 10 mayores países productores del mundo, superando a naciones como Nigeria.

No obstante, este no es el primer gran yacimiento descubierto en los últimos meses. En noviembre se exploró el de Tupi, cuyas reservas recuperables han sido estimadas entre cinco y ocho millones de barriles, según el sondeo de dos pozos, de los que uno no ha concluido aún su evaluación.