Tras la preocupación inicial y el mal arranque de campaña, la pesca de lamprea en el ríos Ulla y Miño se está recuperando de forma pasmosa, ofreciendo en la actualidad unos resultados que los propios pescadores definen como "espectaculares".

El nivel de capturas está alcanzando tales extremos que en un solo día pueden recogerse entre 800 y 900 piezas gracias a la labor de los valeiros -que faenan a flote, con nasa butrón, durante el día- y las pesquerías situadas río arriba, donde se captura el pez con artes fijas que permanecen caladas durante la noche.

Todos los pescadores consultados se muestran encantados con el nivel de capturas, aunque también están preocupados porque, ante tal abundancia, los precios cayeron de forma brusca.

Una pieza grande, que hasta hace un par de semanas podía venderse a 35 ó 40 euros, apenas supera ahora los 20 euros.

Uno de los pescadores consultados señala que actualmente "hay barcos pescando una media de 30 lampreas diarias", y añade que "la grande se vendía antes a 30 ó 35 euros la pieza, y ahora apenas llega a los 20 euros, y todo debido a su abundancia, tanto aquí en el Ulla como en el río Miño, donde incluso la están vendiendo a 15 y 16 euros".

De ahí que algunos pescadores teman incluso que el precio pueda seguir cayendo en las próximas jornadas.