Galicia es la quinta comunidad española que más fondos públicos invierte en la creación de nuevas empresas, con 99,3 millones de euros, resultado de la colaboración entre la gestión de fondos de capital riesgo y el dinero de las administraciones públicas. Así se desprende de un informe elaborado por la entidad Mobius Corporate Venture Capital, que analiza la inversión en capital riesgo público a través de una ratio que mide el compromiso inversor de las regiones en función de su contribución al Producto Interior Bruto (PIB) nacional. Navarra, Asturias, Aragón, País Vasco y Galicia son, por este orden, las regiones que más esfuerzo económico dedican a las iniciativas emprendedoras en comparación con su volumen de riqueza, mientras que Madrid, La Rioja, Castilla y León y Castilla-La Mancha conforman el grupo de las que no lo hacen.

Ranking

Durante los primeros meses del año, según el estudio de Mobius, Navarra fue la comunidad que más dinero había dedicado a este tipo de iniciativas vinculadas con el capital riesgo, medido en relación a su participación en el PIB español. De hecho, con un compromiso de invertir 185 millones, ya había ejecutado 118, con una ratio del 79,4% (derivado de que el territorio foral representa el 1,7% del total de la riqueza nacional).

La segunda región que más fondos dedicó a la creación y el desarrollo de nuevas empresas fue Asturias, con 82 millones previstos (34,3 realizados) y una ratio del 37,3%. El tercer puesto lo ocupó Aragón, con 102,5 millones y una ratio del 33%, seguido del País Vasco (167,5 millones y un 26,1%) y Galicia (99,3 millones y un 18,7%).

Cataluña, pese a que es la comunidad con más inversión en capital riesgo (170 millones de euros), se encuentra en una posición media en la tabla con una ratio del 9,3% (debido a su elevada participación en el PIB nacional).

Junto a Cataluña aparecen Extremadura (15,9 millones, 9,3%) y Cantabria (12 millones, 9,2%).

En contra de lo que pudiera parecer, Madrid es la comunidad que menos capital riesgo público invierte, en proporción a su capacidad. Ocupa la última posición en la lista con una ratio de 1,39%, alcanzando un volumen de inversión comprometido de 24 millones de euros. En el caso madrileño, las pymes encuentran serias dificultades para conseguir financiación pública debido, fundamentalmente, a la presencia del Gobierno central, el elevado número de empresas multinacionales y el escaso y caro suelo para polígonos industriales, entre otros motivos.

Por encima de Madrid se encuentra La Rioja, con apenas 3 millones y una ratio del 3,7%, junto a Castilla y León (24,5 millones, 4,3%) y Castilla-La Manca (19,1 y 5,6%). El informe señala, en cualquier caso, que la aportación pública al capital riesgo es aún bastante reducida, sobre todo si se tiene en cuenta que este sector ha incrementado su peso en España, hasta colocar al país en el quinto puesto europeo por inversiones.

Fórmula

La fórmula del capital mixto (público y privado) se está convirtiendo en una de las más empleadas por las comunidades españolas para incentivar las iniciativas empresariales, ya que la Unión Europea (UE) no puede considerarlas como ayudas gubernamentales. Los fondos públicos de capital riesgo son administrados por gestoras independientes, que cobran por sus servicios una comisión y en caso de lograr rentabilidad obtienen una participación en la misma.