La corporación de A Estrada, dividida por la celulosa de Altri

El pleno ordinario de mayo del Concello de A Estrada, celebrado este jueves, estuvo marcado por el intenso debate en torno a la instalación de la macroplanta de Altri. Los grupos municipales del PSOE, BNG y Móvete presentaron una moción conjunta en contra del proyecto, destacando su impacto negativo en la salud pública, el medio ambiente y el tejido económico local.

Desde el PSOE criticaron duramente al gobierno local, acusándolo de falta de visión industrial y de abandonar las necesidades de las empresas estradenses. Reclamaron más implicación en la captación de inversiones modernas, vinculadas a sectores como el hidrógeno verde, la inteligencia artificial o los semiconductores, en lugar de apoyar un modelo basado en industrias contaminantes como la pasta de papel.

El BNG, por su parte, lamentó que el ejecutivo municipal se pusiera «de lado» para no incomodar a la Xunta, pese a la oposición generalizada de la población local, la ciudadanía en general, las universidades y colectivos ecologistas. Recordaron los daños causados por Ence en la ría de Pontevedra y advirtieron que Altri puede repetir ese impacto en el río Ulla.

Desde Móvete, la crítica se centró en la pérdida de una oportunidad para defender el patrimonio natural de A Estrada. Alertaron de las consecuencias negativas sobre la agricultura, la pesca y el turismo rural, vinculadas al deterioro ambiental que supondría la instalación de la planta.

El grupo municipal del PP defendió su propia moción, finalmente aprobada con sus votos, apelando al respeto de la legalidad vigente en la tramitación del proyecto, una postura que la oposición calificó de «declaración de perogrullo».