El Bar Olé reabre sus puertas bajo el nombre de Pepita Claveles

La calle Antón Losada Diéguez de A Estrada suma un nuevo local a su oferta comercial y hostelera, que no es demasiado extensa. Se trata del Bar Olé, un establecimiento cerrado desde hace casi dos décadas y que reabren tres mujeres bajo el nombre de Pepita Claveles. Ellas son Ángeles Cortizo, Maité González y Angie Fernández. Se conocieron trabajando juntas en otro negocio y decidieron dar el paso de ponerse al frente de su propio proyecto. Inicialmente, la idea era abrir la Taverna da Feira, según explica Cortizo, aunque debido a ciertas complicaciones esto quedó en nada, y acabaron decantándose por este local de la calle Losada Diéguez, perpendicular a la Avenida de Santiago y una zona que actualmente pide a gritos su revitalización.

Las tres socias tienen numerosas ideas para conseguir poner a su negocio en el mapa de los estradenses. Entre ellas, contarán con una carta en la que, adelantan, incorporarán platos originales que prometen desmarcarse de la oferta actual en el pueblo. «Tendremos platos combinados y comida más tradicional, pero también estamos diseñando algunas opciones más originales para aportar nuestra propia identidad al bar», comparte Cortizo. Esta será la encargada de los fogones, mientras que González y Fernández se encargarán de la barra y de atender las mesas.

La inauguración tuvo lugar este sábado 8 de febrero, y pese a no darle demasiada difusión a nivel publicitario, las recién estrenadas empresarias hosteleras quedaron satisfecha con el nivel de asistencia. «Vino bastante gente para ser un día en el que hizo tan mal tiempo, estamos bastantes contentas con la acogida que hemos tenido hasta el momento», sostiene Ángeles.

Con todo, esperan que cada vez vayan dándose más a conocer hasta conseguir hacerse un hueco en los corazones de los estradenses. «A medida que nos vayamos asentando queremos incorporar nuevos atractivos al bar. Para empezar, además de la carta también contaremos con tapas», dice la cocinera.

En cuanto a la estética, mantiene la original del Olé, que recuerda a uno de esos bares de toda la vida, sin demasiada ornamentación y donde lo que cuenta es la calidad de los platos y el servicio. «No hicimos reforma, de momento tuvimos bastante con poner en regla todo el papeleo que hace falta para llevar a cabo la apertura», relata Cortizo, que continúa: «Aunque poco a poco sí iremos realizando algunas mejoras. Por ejemplo, tuvimos que cambiar el rótulo de la entrada».

Asimismo, el horario de apertura será de martes a domingo, de 09.00 a 17.00 y de 18.00 a cierre, que sería en torno a las 23.00 horas.

El Pepita Claveles se suma así a lo que parece una oleada de aperturas en el sector hostelero estradense, después de que se pusiera bajo el foco de la atención pública su salud, así como la del comercio, debido a los sucesivos cierres que tuvieron lugar entre finales del 2024 y principios de este año. No obstante, su caso difiere del resto pues la calle Antón Losada Diéguez se encuentra en las cercanías del centro estradense, pero deslocalizada de las zonas de más tránsito, como son la Calvo Sotelo o la Zona dos Viños. Promete así ser un incentivo para reactivar esta parte de la villa.

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