El BNG de Silleda reclama más supervisión en la gestión del SAF

El BNG de Silleda acusa al Concello de «echar balones fuera» respecto a la gestión del Servizo de Axuda no Fogar (SAF). Rechaza la acusación de politización y recuerda que su labor es, precisamente, la de fiscalizar la gestión del gobierno local. Al mismo tiempo, pone en duda la capacidad de diálogo de los responsables municipales con sus propios trabajadores, asegurando que la solicitud de ayuda de estas empleadas al partido de la oposición es una prueba de esta deficiencia.

Uno de los principales puntos del conflicto, es la financiación del SAF. Ambas partes coinciden en que debería ser sostenido al 50% por el Estado y la Xunta, pero el BNG insiste en que ambas partes incumplen esto, por lo que es el Concello el que tiene que sostener esto con un aporte de 400.000 euros, que es la mitad del presupuesto, aparte del esfuerzo que ya tuvo que hacer al asumir la deuda de 200.000 euros que dejaron las empresas privadas

Las trabajadoras solo piden una mejor coordinación, aprovechando los recursos humanos del área de Bienestar Social, que permita prestar un mejor servicio, cumplir con los derechos de las trabajadoras e incluso reducir gastos para las arcas municipales.

Desde el BNG tienen claro que «la supervisión que hacen la concejala y la alcaldesa de las personas encargadas de coordinar el servicio del SAF es nula y merecedora de nuestra reprobación pública».