Cuarenta años cultivando futuro
Irmáns Picaño cumple 40 años desde su apertura, en un pequeño establecimiento de la calle Iryda de A Estrada. Ahora, esta empresa familiar gestiona tres establecimientos, uno en el casco urbano y otros dos en el Polígono Industrial de Toedo, incluida su recién inaugurada agroferretería.

De izquierda a derecha, Adrián, Fernando e Iván Picaño en la nave de su recién inaugurada agroferretería. | Bernabé
Reinventarse o morir. Bajo este lema, la empresa familiar Irmáns Picaño ha conseguido mantenerse como negocio referente en el sector agrario incluso tras los diversos cambios que este ha sufrido a lo largo de los años en la zona de A Estrada y alrededores. Son ya 40 años desde que Fernando y su hermano abrieron una pequeña tienda en un local de la calle Iryda, la cual atendían con sus parejas. Desde entonces hasta ahora, casi medio siglo después, han ido creciendo hasta gestionar tres establecimientos –dos en el polígono de Toedo y uno en el casco urbano– y contar con una plantilla de doce personas.
La primera generación se ha ido desplazando hacia los márgenes para dar paso y capacidad de decisión a los más jóvenes, Adrián e Iván Picaño, hijos de Fernando y que decidieron seguir adelante con el negocio familiar pese a que, como su padre indica: "Este es un trabajo muy esclavo".
Nadie tiene la fórmula del éxito, pero algo está haciendo bien este equipo, que hace diez días inauguraba una nueva línea de negocio. Se trata de una agroferretería en el polígono de Toedo, en la que su clientela podrá encontrar todo tipo de productos relacionados con la actividad en el campo, desde robótica más sofisticada hasta los aperos tradicionales.
"La idea inicial era abrir en Santiago, porque con los años hemos ido captando clientela de otros concellos, como Vedra o Boqueixón, y queríamos seguir expandiéndonos, pero tras pensarlo mucho decidimos apostar por A Estrada", relata Iván, que añade: "Irmáns Picaño nació aquí, llevamos aquí toda la vida y creemos que somos los estradenses los que tenemos que tirar de nuestro pueblo para arriba".
Estas declaraciones llegan en un momento en el que el debate sobre la rentabilidad del municipio para albergar iniciativas comerciales y empresariales está en tela de juicio, después del cierre sucesivo de varios establecimientos dedicados a diversas ramas y ubicados en el casco urbano.
Pese a que esta agroferretería estaba pensada originalmente para instalarse en la capital gallega, desde Irmáns Picaño aseguran que A Estrada es también una buena localización: "Creemos que no habrá problema para atraer clientela, ya que estamos cerca de Boqueixón, Vedra y otros concellos que tiran más hacia Santiago. Además, no hay oferta como esta en la contorna, por lo que se llena un hueco de mercado", sostiene Fernando.
Para ser más exactos, en esta nave los clientes podrán encontrar desde piensos y abonos –línea en la que se especializa Irmáns Picaño– hasta tornillería, riego, material electroportátil, calzado y equipos EPI, así como artículos ligados al mundo equino, a la poda o a la apicultura.
En otro orden, la empresa ha estado decantándose por el polígono industrial, aun manteniendo su tienda en la villa, por un simple motivo: la comodidad del cliente. "Nos dimos cuenta de que era más práctico un espacio industrial, con aparcamiento propio, especialmente para los clientes que vienen con vehículos de mayor dimensión o camiones. Por lo general, la comodidad es lo que más se busca", expresa Fernando.
Este estradense ha visto cambiar el sector agroganadero en A Estrada desde el 85, cuando abrió la tienda junto a su hermano, hasta ahora. "Diría que hubo tres grandes cambios. El primero fue la desaparición de las explotaciones pequeñas, de menos de diez vacas. Después fueron dejando de existir las medianas, de unas 30. Ahora solo quedan pocas explotaciones y todas llegan o rozan el centenar de cabezas", cuenta el empresario, que continúa: "En general, ya no hay animales en el campo, los mayores no pueden trabajar y los jóvenes prefieren las ciudades".
Por este motivo, Picaño padre tiene claro que la clave está en "adaptarse a los nuevos tiempos", puesto que, si no, "te lleva la corriente". Para continuar actualizándose cuenta con la ayuda de sus dos hijos, que pertenecen a una nueva generación y llegan con ideas frescas. Con todo, para el patriarca de este negocio familiar el relevo generacional no es importante: "Yo estoy contento siempre que ellos lo estén. De momento tienen ganas de apostar por esto, pero si algún día quieren dejarlo, no seré yo quien lo impida".
Suscríbete para seguir leyendo
- Localizan en un albergue de A Coruña a la mujer que se buscaba desde ayer por mar y aire en Rande
- Se busca por mar y aire a una mujer que se arrojó al agua en Rande
- Una okupación eterna: «Es inhumano»
- Los trabajadores gallegos que rechazan un empleo por su «insuficiente salario» se reducen a la mitad en dos años
- Un hombre que orinaba en la calle en Pontevedra permite localizar un foco de venta de droga en el centro histórico
- De antiguo complejo textil a ser el hotel con más encanto de Galicia: un paraíso 'escondido' a cuarenta minutos de Vigo
- El Celta negocia con seis artistas para los conciertos en Balaídos de este verano
- El furor por el Ozempic para adelgazar vacía las farmacias y los gallegos lo buscan en Portugal