La atención pediátrica en Lalín queda un tiempo en manos de un solo facultativo

En el servicio de Pediatría del centro de salud de Lalín había ayer más pacientes de lo habitual. Con el cambio estacional y la caída de las temperaturas o las oscilaciones térmicas propias de estas épocas del año son habituales los procesos infecciosos o víricos que acaban con los menores en consulta por cuadros de tos o mucosidad acompañados de fiebre. Que fuese lunes y después de un puente podría estar detrás de esta acumulación de padres acompañados de sus hijos en las consultas, pero la realidad es que ayer solo estaba trabajando uno de los tres pediatras que a diario pasan consulta en el servicio de primaria del Centro Integral de Saúde (CIS).

En una de las puertas de las consultas [hay seis, de las que la mitad corresponden a despachos de médicos especialistas y las otras tres a los servicios de enfermería] se colgó un cartel para informar a los usuarios de que solo había uno y que por tanto «la demora en la atención a los pacientes será mayor de la habitual». Al mismo tiempo en el folleto se manifestaba la confianza en que la situación se pudiese normalizar lo antes posible.

Consultado el Servizo Galego de Saúde, la gerencia del área sanitaria de Santiago aclaró que esta situación excepcional se debe a que uno de los profesionales se encuentra provisionalmente de baja y que su reincorporación podría realizarse en poco tiempo. Podríamos estar hablando de días y, aunque se buscará que sea lo antes posible, podría ser en lo que resta de semana o no. La otra es más complicada, pues el profesional de pediatría que falta no regresará a su puesto de Lalín al haber solicitado el traslado a otra área sanitaria distinta. La gerencia advierte de que a pesar de que se está gestionando la incorporación de un nuevo profesional, esta tarea no será ni mucho menos sencilla debido a la escasez de este tipo de especialistas en la sanidad autonómica. Es decir, en el peor de los escenarios el recién estrenado centro de salud de Lalín no dispondría de tres pediatras hasta dentro de un tiempo que podría ser prolongado, a tenor de las explicaciones ofrecidas desde este servicio adscrito a la consellería.

Mientras tanto una sola profesional asume la carga de trabajo de tres, cuestión que condiciona el funcionamiento de cualquier servicio público que pierde, aunque sea de forma temporal, la mayor parte de su plantilla. Usuarios consultados aseguran que el trato dispensado fue bueno, aunque con las lógicas demoras en la atención debido a la escasez de facultativos.

Por otro lado, cabe recordar que meses atrás el Sergas convocó, a través de un concurso de méritos, una plaza que permitiría disponer de atención pediátrica en horario de tarde, pero la incorporación de este profesional nunca se produjo al renunciar al puesto.

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