“Más que a mí, este reconocimiento es un homenaje a la tradición de toda la zona”

Como cada año, la asociación Amigos da Terra de Montes celebra su encuentro anual y entrega de medallas. En esta ocasión serán cuatro las personalidades reconocidas por su labor a la hora de promover y preservar el patrimonio de la zona, y entre ellos se encuentra el arquitecto Luis Gil Pita. Natural de Cerdedo-Cotobade y afincado en Soutelo de Montes, es una figura relevante del panorama arquitectónico actual y, junto a y Cristina Nieto Peñamaría, ha recibido numerosos reconocimientos y menciones en premios de ámbito nacional. Especializado en el campo de la rehabilitación y mantenimiento de edificios contemporáneos recibe mañana sábado la medalla de oro de la asociación por su vinculación con la tradición y los oficios ancestrales de la zona.

–¿Qué supone para usted este reconocimiento a su labor profesional por parte de la asociación Amigos da Terra?

–Este es un reconocimiento que me satisface mucho y acepto también con mucha humildad. Pero, más que hacia mi persona, lo veo como un reconocimiento a la tradición de toda la zona de Terra de Montes, a toda la historia ligada a los antiguos oficios, especialmente a los de la cantería, la herrería y la carpintería. Los premios siempre están bien, pero mejor si están relacionados con el medio, la naturaleza y, sobre todo, con el sitio de donde eres.

–¿Qué tipo de vinculación tiene usted con esta zona?

–Es una vinculación familiar. Mi padre es de la zona y viven aquí, y mi pareja también es de Terra de Montes. Puede decirse que sí, que soy de allí.

–Usted está especializado en el campo de la rehabilitación y mantenimiento de edificios contemporáneos y, en este caso, la asociación lo homenajea por su vinculación con la tradición ¿Es tan importante para usted?

–Sí. Desde mi oficina practicamos una arquitectura siempre respetuosa por la historia, por la restauración, por la rehabilitación y por la recuperación del patrimonio. Algunos dicen que somos especialistas en ese terreno, pero también hacemos muchos trabajos de arquitectura contemporánea.

–Esta celebración tiene una gran relevancia en la localidad de Soutelo de Montes, ¿Por qué cree que es importante para la zona un evento así?

–Yo creo que un acto así es importante porque reconoce y profundiza en el lazo tan fuerte que tuvo el territorio con el mundo de la construcción. Ya que, además de la tradición secular de la zona ligada a la cantería, durante el siglo XX ya existieron empresas, tanto grandes como medianas, que estaban –y algunas continúan– ligadas al mundo de la construcción. Mi abuelo, por ejemplo, ya trabajó como cantero en las infraestructuras del ferrocarril que unían Galicia con Castilla. Por tanto, yo creo que conmemorar algo así es también una cuestión que tiene mucho que ver con la identidad. Por eso digo que este galardón, más que para mí, tiene que ver con un campo de trabajo.

–Su carrera, como ya comentamos, está vinculada a la tradición ¿Cómo surge ese lazo?

–Seguramente surge porque al trabajar con todo lo que tiene que ver con la recuperación y la restauración, en el fondo, no rehabilitas solo los edificios, también lo hace su historia. Por ejemplo, intentas recuperar y respetar las formas tradicionales con las que antes se trataba la madera o la piedra. De paso que recuperas el edificio, recuperas los procesos artesanales que son los que después le dan más carácter a la rehabilitación.

–¿Qué le parece importante a la hora de rehabilitar un edificio?

–Lo que nos diferencia a nosotros es que recuperamos los usos y procesos constructivos naturales, sin una mirada nostálgica al pasado ya que adaptamos los edificios al mundo contemporáneo.

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