Diez grupos de música tocarán en los conciertos y las sesiones vermú de la Algarabía de Lalín

La Algarabía de Lalín celebra, a partir del 30 de agosto y hasta el 1 de septiembre, su tradicional festival, que cumple cuarenta años. Encargado de la organización está el colectivo O Naranxo, del que forma parte Miriam López. Es ella misma quien revela las actividades que están preparando para esta nueva edición.

La programación comienza el viernes 30, ya de noche, con los conciertos. Ese día se subirán al escenario Akarakan, que llegan desde Gondomar; el trío noventero del epicentro galaico, Chorima; Desguazed, y el grupo de post-punk, power pop e indie rock, Meu.

La fiesta continuará el sábado por la mañana, aunque todavía no están confirmados los horarios con el pregón. Sobre quien será el encargado de darlo, Miriam cuenta que “aún está por anunciar, por ahora es sorpresa”. Tras el discurso a cargo de esta misteriosa persona, tendrá lugar el clásico cambio de la placa de Praza das Pipas, que se lleva realizando durante años.

Además, se mantendrán otras actividades como “una competición entre dos colectivos de Lalín, que todavía no tenemos muy marcada”, revela la organizadora. A modo de descanso, tendrá lugar la sesión vermú, que estará amenizada por el grupo Aquí e Alá. Miriam confiesa que están deseando ver su actuación en vivo porque “tienen hecho temas que tienen que ver con cosas que ha hecho nuestra asociación”.

Para el sábado por la tarde también está previsto que se lleven a cabo diferentes actividades en la zona del Parque se Loriga. Ya por la noche, de nuevo, arrancará una nueva jornada musical con cuatro nuevos grupos: Bones of Minerva, Eskravos, Noite Atari y The Capaces. Sobre esto, la coordinadora del festival explica que de esas actuaciones “nos gusta destacar que va a haber mucha presencia femenina en el escenario”.

El último día de este festival será el domingo, 1 de septiembre, que arrancará, como siempre con la tradicional Volta ao Empalme para vehículos no contaminantes. En lo que consiste esta actividad es en hacer un recorrido desde el pueblo, hasta el Empalme y volver. Por supuesto, solo se puede realizar en vehículos no contaminantes como bicicletas o a pie. Una vez terminada esta ruta, se pasará directamente a la sesión vermú en la que los asistentes podrán disfrutar de la actuación del grupo Distrito 16.

Cabe destacar que tanto en esta jornada como en la del sábado se seguirá realizando el picnic familiar, en el que cada uno llevará su propia comida, y donde las diferentes familias y demás vecinos podrán compartir tiempo de calidad. Como recuera Miriam: “Estas actividades son abiertas a todo el mundo, tal y como lo fueron siempre”.

Volviendo a la programación, tras la sesión vermú del domingo, tendrá lugar una comida de confraternización, tras la cual, ya por la tarde, se realizarán los juegos populares, junto con otras actividades. El festival termina con la novedad de este año, que es la actuación infantil de Pakolas, a las 18.00 horas, pondrá el punto y final a estas tres jornadas musicales y de convivencia vecinal.

Cena y actuación para cuarenta personas

Otra de las novedades es la Cena da Algarabía que se celebra este viernes. Es la primera vez que se realiza una iniciativa así y Miriam cuenta que surgió “en sinergia con establecimientos y con gente de la zona, con la que estamos encantados, porque nos gusta mucho que colaboren con nosotros y poder hacer temas así”. Una parte de lo recaudado con esta cena irá destinado a cubrir los gastos del festival. La idea se conforma de un espectáculo y de una cena, y es necesario acudir con entrada. La organizadora cuenta que “no hay entradas solo para el espectáculo ni solo para la cena”, se trata de un pack. La disponibilidad es de 40 plazas, y hoy es el último día para conseguir las invitaciones, que cuestan 30 euros por persona. Hasta el momento la venta iba muy bien y solo quedaban disponibles alrededor de 8 entradas. Esta es una oportunidad única de ver el espectáculo No tempo de un café, de Benxamín Otero y Celso F. Sanmartín, y de disfrutar de una cena que incluye dos primeros, dos segundos, bebida, café y postre, porque “por ahora se va a hacer esta cena únicamente. Nos gusta que haya cosas exclusivas y no que se repitan todo el rato”, cuenta Miriam. Y confirma que en próximas ediciones “va a haber más sorpresas que ya tenemos pensadas”.