Saltar al contenido principalSaltar al pie de página

El primer baile, entre nervios

El pistoletazo de salida en la arena de la Rapa de Sabucedo 2024 se cierra con 63 bestas aloitadas en dos horas de curro

Los servicios sanitarios atienden 11 lesiones, ninguna grave | El garañón O Cristo estrena las tijeras este año

Sabucedo celebra la 'rapa das bestas'

Agencia Atlas / BERNABÉ /JAVIER LALÍN

A Estrada

Ya empieza. El galope de los caballos sobre el asfalto hace latir la aldea de Sabucedo y notifica de su llegada a los que, impacientes, esperan sentados en las gradas del curro. La voz familiar del presentador, Pablo Chichas, advierte: “Silencio, este año los caballos están especialmente nerviosos, vienen del monte y tienen que familiarizarse con el curro”. La música ambiente se apaga y la expectación es tangible en el ambiente. Se abren las puertas del hemiciclo y por fin, entran como un relámpago de libertad y bravura las manadas salvajes. En el palco de la prensa, las cámaras se agolpan sobre la balaustrada que las separa de la arena. Poco a poco, el curro se llena. Mientras, solo se escuchan los avisos de los aloitadores y demás voluntarios: “Apartad, no os pongáis en la puerta”.

A medida que los animales se calman y se aclimatan a ese temporal y benévolo encierro, vuelven los aplausos a las gradas. Es oficial, comienza el primer curro.

La cantera de aloitadores se libera del miedo

Las gaitas recuperan su voz y se hacen escuchar en todo el hemiciclo. Como manda la tradición, los primeros en actuar son, precisamente, los más pequeños. La cantera de aloitadores se libera del miedo y comienza a retirar poco a poco los “bichos”, como las gentes de esta parroquia estradense llaman a los potros. Por supuesto, siempre protegidos por los más veteranos. Es una forma de que se acostumbren unos a la presencia de otros, pues el vínculo entre hombre y caballo debe continuar para que la Rapa perviva.

Una vez las cabezas más jóvenes descansan bajo el palco de autoridades para protegerlas de posibles daños, sus equivalentes humanos también se retiran. Les toca a los mayores performar la danza habitual. Primero, uno salta sobre el lomo de la yegua, otro se une a la coreografía por el lateral, le atrapa la cabeza y aprovecha para taparle los ojos y susurrarle al oído que se tranquilice, que se esté quieta. Mientras, un tercero, generalmente más experimentado, agarra la cola. Una vez inmovilizada, se procede a cortarle la crin y desparasitarla.

En esta ocasión, el primer aloitamento llega acompañado de una anécdota, perfectamente narrada a través del micrófono por el locutor Pablo Chichas. Se trata del garañón O Cristo, uno de los más bravos de la manada de O Santo. Conseguir bajarlo del monte y cortarle las sedas era una apuesta entre los aloitadores. ¿El premio? Una buena cena, que a todas luces tendrá lugar, pues pese a oponer resistencia, O Cristo cayó el primero. Cabe destacar, sin embargo, que este macho es extremadamente escurridizo, pero también leal, ya que durante la “baixa” de este viernes tuvo la oportunidad de escaparle a los de Sabucedo, pero se rindió voluntariamente al ver que el resto de la manada no lo acompañaba en su fuga.

Los garañones

Con todo, este no es el único garañón entre los equinos que inauguran el curro de este año, también están presentes Confinado, Ciclón y Lorenzo. Eso sí, inusualmente tranquilos, ya que esta primera vuelta de la Rapa no dejó ninguna de las espectaculares estampas de enfrentamientos entre sementales.

Mientras se suceden los aloitamentos, los de Sabucedo se van turnando. No conviene gastar toda la energía, pues todavía quedan dos días por delante y a eso hay que sumarle el cansancio acumulado de estas semanas de preparativos. Destaca la juventud de alguno de los benjamines, así como su destreza, que viene a demostrar que en el duelo cuerpo a cuerpo con las bestas lo que importa no es la fuerza, sino la técnica.

Además de admiración, vítores y aplausos, desde las gradas también se escuchan algunas exclamaciones de susto. Las manos a la cabeza o a los ojos en los momentos de mayor tensión. Uno de ellos fue, por ejemplo, el instante en el que en un revolcón con una de las yeguas, dos aloitadores acabaron siendo golpeados contra el muro del curro. Uno de ellos sufrió una lesión en la cabeza que requirió puntos y el otro, heridas en el rostro y la oreja, peo afortunadamente, ninguna de las lesiones fue grave.

En general, el parte médico de esta primera jornada de la Rapa fue inferior al de otros años. En total, los servicios sanitarios atendieron cuatro esguinces, cinco cortes –la mayoría de ellos generados con las propias tijeras al cortar las crines– y las dos incidencias anteriormente mencionadas.

Para conseguir que los aloitadores sufran el menor número de daños posible es crucial el trabajo en equipo. Este se entrena tanto fuera como dentro de la arena, con una comunicación constante, de modo que las actuaciones de unos no perjudiquen a los otros. En este sentido, uno de los protocolos más respetado es el de que no se pueden realizar más de dos aloitamentos al mismo tiempo, ya que lo contrario resultaría peligroso.

Danza tras danza, los nervios del principio se pierden y la hora y cuarenta y cinco minutos de duración del curro se pasa. En total se raparon 63 bestas. Las restantes irán pasando por la tijera entre la cita de hoy y la de mañana. En concreto, el segundo encuentro con la arena tendrá lugar en esta jornada de domingo, a las 12.00 horas.

Las autoridades políticas

La Rapa das Bestas, en proceso de convertirse Bien de Interés Cultural (BIC), ha alcanzado gran relevancia a nivel autonómico e incluso nacional. Muestra de ello es la representación política presente ayer en el palco de autoridades, en el que podían verse caras como la del Conselleiro de Cultura, Xosé López Camos, el Conselleiro de Educación, Román Rodríguez, el presidente de la Diputación de Pontevedra, Luis López, la diputada provincial de Turismo, Nava Castro, o la portavoz del BNG Galicia, Ana Pontón. Además de miembros de la corporación local, como el alcalde, Gonzalo Louzao, el portavoz del PSOE, Luis López, o el del BNG, Xoán Reices, entre otros.

Tracking Pixel Contents