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La mitad de los parados de las comarcas lleva más de un año sin encontrar empleo

El perfil del desempleado de larga duración es el de una mujer mayor de 25 años | Ahí se concentran el 58% de los casos | Hay 242 personas que no han trabajado en su vida

Clausura del taller de empleo compartido entre Rodeiro, Agolada y Dozón.

Clausura del taller de empleo compartido entre Rodeiro, Agolada y Dozón.

Alfonso Loño

Alfonso Loño

LALÍN

Mujer mayor de 25 años. Este es el perfil del parado de larga duración en las comarcas, pues en este segmento entran 1.530 de los 2.611 desocupados con los que los nueve ayuntamientos de Deza y Tabeirós-Montes cerraron el tercer trimestre del presente año. Los registros de la Consellería de Promoción do Emprego nos permiten conocer características de los desocupados en función de su sexo o tiempo que llevan a la esperar de acceder al mercado laboral. Los datos de trazo grueso ponen de manifiesto que casi la mitad de los desocupados acumula más de un año sin trabajar, pues son exactamente 1.244 en las comarcas si incluimos los de Cerdedo-Cotobade. Mientras tanto, los que llevan como máximo un mes pendientes de inserción laboral suponen solo doce de cada cien o, lo que es lo mismo un total de 326.

En primer lugar vamos a concretar el número de desocupados de larga duración por municipio, teniendo en cuenta que el promedio absoluto es del 47% del total de trabajadores que a estas alturas no cotizan con su salario al sistema público. En Lalín son 409 de sus 890 y 402 de un censo total de 825 desempleados en el caso de A Estrada. En Silleda están en esta situación 107 de sus 256 parados y en Vila de Cruces son 81 de 160. En Rodeiro representan 34 de 61 y 33 de 48 en Agolada, mientras que en el término municipal de Dozón hay 11 parados que acumulan al menos un año sin trabajar de su veintena de demandantes. En Forcarei son justo la mitad de los 95 y algo más del 50% en Cerdedo-Cotobade, con 129 parados de larga duración y 236 vecinos sin trabajo al cierre del pasado mes de septiembre.

Si observamos la diferencia por sexos hay que indicar que entre la totalidad de los desocupados de las comarcas casi el 61 por ciento son mujeres. Además del dato ya mencionado de las 1.530 féminas sin trabajo que han rebasado los 25 años de edad hay que añadir otras 61 que están por debajo de esa franja de edad. Por el contrario, los varones en paro suponen el 40% del total, con 976 mayores de 25 años y otros 44 que no alcanzaron todavía el cuarto de siglo de vida.

114 lalinenses nunca trabajaron

En otro orden de cosas, los datos oficiales nos permiten conocer cuántas personas no han trabajado nunca, que son los que aparecen en el balance de sin empleo anterior. En esta situación se encontraban al cierre del mes de septiembre un total de 242 vecinos (164 de elos mujeres), dato que representa el 9,2 por ciento del total de desempleados. Lalín, incluso con unos índices de desempleo un poco superiores a los de A Estrada, contabiliza 114 personas que nunca han trabajado, mientras que en la capital de Tabeirós son 58. En Silleda figuran 19, una docena en Vila de Cruces, 7 en Rodeiro, 5 en Agolada, 3 en Dozón, 11 en Forcarei y 13 en Cerdedo-Cotobade.

Inserciones en el taller compartido entre Rodeiro, Agolada y Dozón

El delegado territorial de la Xunta en Pontevedra, Agustín Reguera, clausuró ayer el taller de empleo dual financiado por la Xunta con más de medio millón de euros en los concellos de Dozón, Agolada y Rodeiro. En este taller, que tuvo una duración de un año, participaron 20 alumnos entre las especialidades de Auxiliar en conservación y mejora de montes y Repoblación forestal y tratamientos silvícolas. Las prácticas remuneradas llevaron a los participantes a realizar trabajos en la conservación y mantenimiento de zonas públicas, áreas recreativas, parques, campos de la fiesta y zonas verdes de titularidad municipal. El de Rodeiro pudo acondicionar las zonas verdes de la parcela de la plaza y mejorar la imagen de sus jardines públicos. Varias empresas que se interesaron por el alumnado y varios alumnos finalizan el taller de empleo con un contrato y otros apostaron por seguir formándose.

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