Este fin de semana la Zona dos Viños de A Estrada acoge el Entroido de Verán, pese a que no es carnaval, ni verano. El motivo de esta paradoja se debe a que el evento tuvo quedó suspendido durante un par de semanas, por contratiempos en la organización. Así pues, pese a no poder celebrarse cuando estaba previsto, el sábado 16, los hosteleros han decidido seguir adelante con una propuesta que sin duda ha conseguido convertirse en reclamo. Prueba de ello era que en la fecha original, los vecinos y vecinas de la localidad decidieron salir igual aunque fuese sin disfraz, generando un ambiente poco frecuente en los meses estivales.
Si bien todavía queda la actuación musical por confirmar, el concurso de disfraces ya tiene sus bases. Habrá dos categorías, una grupal y otra de individual. En cada una habrá dos premios: 150 euros y una botella y dos Magnum (botellas de vino de litro y medio) para el grupo ganador y 80 euros para el segundo puesto. Esta será la cantidad que reciba el vencedor de la categoría individual, junto a otra Magnum, dejando 40 euros para la segunda posición.
A lo largo de estos días los hosteleros irán publicando los pormenores, por lo que aquellos que tuviesen sus trajes preparados para el sábado 16 podrán lucirlo para despedir septiembre, y los más rezagados aún tienen tiempo para pensar en las galas que le permitan destacar en el concurso y quizás hacerse con alguno de los premios.
Asimismo, parece que la meteorología hará una pequeña concesión a esta iniciativa y si el pronóstico se cumple, el día 30 promete ser una jornada soleada y de altas temperaturas.
La Zonas dos Viños dice así adiós al verano después de tres meses en los que se intentó generar afluencia pese a que la playa y las verbenas eran fuertes rivales para el negocio.
Una de las propuestas que llevaron a cabo en este sentido fue el ciclo de conciertos “Agostomusical” para amenizar la hora del vermú los sábados. En total contaron con tres actuaciones, a pesar de que había cuatro programadas, pues la de Bufalo Vil el día 19 tuvo que cancelarse a causa de la lluvia. La medida dio resultado y los hosteleros quedaron satisfechos con su funcionamiento, abriendo la puerta a que puedas llevarse a cabo actos similares a lo largo del año.
En cuanto al nivel de trabajo de los últimos tres meses, que como ya se mencionaba anteriormente suele ser una época complicada por la cantidad de alternativas de ocio de las que se dispone, hay discrepancia entre los empresarios. En el 20 Berzas y la taberna A Riala, por ejemplo, admiten estar contentos con el nivel de trabajo, “por encima de las expectativas”, según confesaba Alejandro Brey. Mientras que en O Candil de Silvia el negocio ha sido más flojo: “mi clientela habitual es más de verbenas” compartía la responsable. Ahora, con el Entroido de Verán cierran esta etapa y reciben al otoño y la rutina que acompañará hasta el próximo junio.
