El conselleiro de Educación,Román Rodríguez, visitó ayer la central de biomasa que da servicio a varios edificios públicos de Lalín y que supone una inversión de 1,3 millones por parte de la Xunta. Acompañado del alcalde del municipio, José Crespo, destacó que la administración gallega trabaja en la mejora de la eficiencia energética de los centros de enseñanza mediante tres líneas de actuación: rehabilitaciones integrales y mejoras sectoriales (cambio de luminarias o las impermeabilizaciones de las fachadas, que permiten un ahorro energético de alrededor del 40%), instalaciones de biomasa y placas fotovoltaicas.
“A través de todas estas medidas, enmarcadas en el Plan de Nova Arquitectura Pedagóxica, buscamos reducir el impacto medioambiental que supone climatizar los edificios educativos. Asimismo, favorecemos el ahorro económico en un contexto de alza de los precios energéticos”, dijo.
En lo referido a la central de biomasa de Lalín, el conselleiro destacó “lo ambicioso de la instalación”, que va a permitir reducir las emisiones de CO2 en 61% y un ahorro económico anual de 27.000 euros. En este sentido, el consumo actual de los edificios –IES Ramón María Aller, CEIP Xesús Golmar, auditorio municipal y guardería de la red Galiña Azul Pontiñas– es de unos 63.000 litros de gasóleo/año, lo que supone 627.000 kWh de consumo energético y unas emisiones aproximadas de 195 toneladas de CO2 equivalente. Con el cambio de combustible, el consumo será de 11,2 toneladas equivalente, por lo que el ahorro estimado es de 184 toneladas, es decir un 94% menos respeto de las emisiones actuales.
Tal y como explicó el conselleiro, la obra está prácticamente finalizada, a la falta de que la empresa haga las pruebas correspondientes y ponga a punto la instalación con los centros ya en uso. “De este modo, está previsto que todo esté listo el 7 de octubre, por lo que la instalación estará en funcionamiento para cuando llegue la época de frío”, señaló.
El titular del departamento educativo de la Xunta recordó que la de Lalín es la tercera instalación de este tipo, tras la puesta en marcha en Pontevedra en 2021 y la que entrará en funcionamiento este curso en Lugo, en la que ahora mismo se están acabando los últimos detalles y que también estará lista para la época de temperaturas más bajas. La nueva instalación de biomasa alimentará a los cuatro edificios mencionados, con un aforo posible entre todos de más de 2.000 personas.
El edificio que alberga la instalación cuenta con una superficie total construida de 192,65 metros cuadrados, con de los compartimentos en el interior: uno destinado al almacenamiento de biomasa y una sala con dos calderas (cada una con una potencia de 500kW, es decir, con una potencia total de 1.0 MW) y equipos de distribución hidráulica.
Por otro lado, el conselleiro aprovechó su visita a Lalín para acercarse, también junto a la edil de Educación, Begoña Blanco, al CEIP Xoaquín Loriga de Prado, donde su departamento acaba de acometer mejoras por importe de más de 48.000 euros. La obra consistió en la construcción de una cubierta a base de estructura metálica para el espacio del patio. Se ejecutó con paneles opacos de chapa de acero y con paneles translúcidos de policarbonato, para garantizar una entrada de luz neutra durante todo el año y evitar el sobrecalentamiento por radiación solar.