Cuatro familias ucranianas deben dejar las viviendas provisionales de la calle Manuel Rivero

Cuatro familias ucranianas de refugiados deberán abandonar otros tantos pisos ofrecidos por el Concello de Lalín en la calle Manuel Rivero. Así le fue transmitido ayer por el grupo de gobierno en una reunión con la concejala Paz Pérez al frente, donde se recordó que la normativa de uso establece que estos hogares no pueden ser utilizados como residencia permanente, sino temporal, además de dar cobertura a otros casos de emergencia social a personas en situación de vulnerabilidad, malos tratos o deshaucios.

Afirma que esta situación de eventualidad ya le fue advertida dos veces el año pasado y ahora se las invita a dejar libres los pisos el 1 de marzo. Estas residencias temporales están ubicadas en uno de los bloques de las antiguas viviendas de maestros de la calle Rivero y en la planta baja del mismo irá el punto de encuentro familiar supracomarcal de la Xunta. Pérez asegura que el gobierno vela por la protección social de estas personas y todas son perceptoras de rentas como otros lalinenses en situación de vulnerabilidad. De los 58 refugiados que llegaron hace casi un año, solo quedan en Lalín la mitad.

Estos días el Concello acomete la demolición de los edificios número 1 y 3 de esta rúa para ser destinados a equipamientos socio culturales.

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