La Diócesis de Lugo escogió un año más tierras dezanas para abrir su año litúrgico con un encuentro. El obispo, Alfonso Carrasco Rouco, presidió los actos, celebrados ayer en los santuarios de A Saleta, en Siador (Silleda), y O Corpiño, en Santa Baia de Losón (Lalín).

La jornada arrancó a las diez y media de la mañana con la visita y oración en la iglesia de Siador. Al mediodía, la comitiva diocesa se trasladó al santuario de O Corpiño para participar en la reflexión El año litúrgico, posibilidad de encontrarnos con Jesús, a cargo José Joaquín Borrajo, vicario general de la Diócesis de Ourense. Vino luego un tiempo la oración y la reflexión personal. Carrasco Rouco presidió la eucaristía, que terminó con una invocación mariana. Luego tuvo lugar una comida de confraternidad.

En el encuentro participaron tanto sacerdotes de la diócesis, como el propio rector del santuario lalinense, José Criado, como feligreses procedentes de las distintas comunidades que conforman el arciprestazgo de Deza.