El BNG tenía previsto abordar en el pleno de hoy (10.00 horas), en el apartado de ruegos y preguntas, acciones a acometer para reabrir la oficina de Repsol en la Praza da Igrexa. El despacho cerró a principios de mes dentro de una reestructuración que obliga a los vecinos de la comarca a llamar a la oficina de A Estrada para encargar las bombonas (y pagarlas en mano cuando se les lleva el distribuidor) o hacer los encargos a través de una aplicación de teléfono móvil, con la dificultad de que de los más de 4.000 usuarios que hay solo en Lalín, el 80% son personas de edad que pueden tener dificultades a la hora de manejarse con la App.

Casualidad o no, resulta que el BNG pensaba pedir hoy en la sesión mantener conversaciones directamente con la sede de Repsol en Madrid para recuperar el servicio, pero es que el gobierno local de Lalín ya está manteniendo conversaciones con la empresa, como indicó la concejal de Comercio, Karen Fernández. La edil indica que era “un servicio esencial que no debió suprimirse”, y menos en una época en la que el consumo de bombonas para estufas se dispara.

El BNG solicitará al ejecutivo local que pelee por recuperar esta oficina, igual que hizo para mantener la sucursal de Abanca en Vilatuxe, que abre por las mañanas. El despacho de Repsol en la Avenida de Bos Aires llevaba abierto en torno a 50 años, y con su cierre únicamente se ahorra el alquiler, ya que mantiene los mismos empleados. El portavoz, Francisco Vilariño, recalca que Repsol obtuvo un beneficio neto este año de 222 millones de euros.