El IES Antón Losada Diéguez de A Estrada es un de los 18 centros escolares gallegos que participarán en la segunda edición de la Liga Maker Drone, una competición en la que cada IES creará el mejor dron con el que cumplir un reto planteado por la organización y que se conocerá el día 4 de noviembre. Por delante tendrán siete meses para dar forma al dron y pilotarlo en la gran final. El centro estradense intentará tomar del testigo del CPR Santa María del Mar, de A Coruña, vencedor de la primera edición en la que los participantes tuvieron que diseñar y poner a prueba un dron para apagar un incendio.

Los alumnos pudieron volar drones con la ayuda de monitores. | // BERNABÉ/JAVIER LALÍN

Al frente del equipo estradense estará el profesor Emilio Villanueva, que realizará una selección de nueve de los alumnos de 2º de la ESO para participar. “Es un reto muy completo, ya que obliga a pensar, diseñar, construir y pilotar un dron para una tarea específica y a hacerlo en un tiempo y con un presupuesto concreto. Es una tarea que se parece mucho a la que tendrían un ingeniero”, explica el profesor.

La selección del centro escolar estradense fue presentada ayer por sus protagonistas, en un acto seguido de una jornada de introducción y presentación de los drones y su funcionamiento, destinada a todo el alumnado de 2º ESO y que tuvo lugar en el pabellón Coto Ferreiro a lo largo de toda la mañana.

La Liga Maker Drone, organizada por la Fundación Barrié y el Instituto Tecnológico de Galicia, se celebra anualmente entre los meses de octubre y principios del mes de mayo del siguiente año. En esta edición, 18 equipos integrados por estudiantes de 2º ESO se enfrentarán al reto de diseñar, programar y volar un dron capaz de resolver un problema social en el menor tiempo posible y con el mayor grado de eficacia. Una vez revelado el reto de la edición de este año, la organización imparte tres sesiones formativas presenciales, de dos horas de duración cada una, sobre: electrónica, programación, soldadura, conectores; manipulación de herramientas y materiales; y funcionamiento de mecanismos, con el objetivo dotar a los equipos de las nociones básicas para el diseño y programación de un sistema operado por un dron que permita resolver el reto.

Paralelamente, la organización organiza una formación específica presencial de tecnología y robótica, así como de entrenamiento en vuelo, que se estructura en tres sesiones de dos horas de duración cada una con el fin de entrenar a los equipos a manejar sus sistemas dron.

Esta competición culmina con la celebración de la jornada de exhibición, un evento gratuito y abierto a toda la comunidad educativa en donde los equipos realizarán las demostraciones de los sistemas dron diseñados para resolver un reto tecnológico que pondrá a prueba su creatividad, ingenio y capacidad para trabajar en equipo.

Durante la jornada de exhibición, los equipos se dividirán en grupos para disputar de forma simultánea una fase previa eliminatoria. El equipo que consiga completar la misión definida en el reto en el menor tiempo posible se proclamará campeón de la Liga Maker Drone. Además, un jurado especializado de expertos en tecnología e innovación premiará a los equipos que hayan realizado el mejor diseño; la solución más disruptiva; el mejor pilotaje; y la mejor presentación.

“Es un reto tremendo que exigirá mucho trabajo”

La gran final

Emilio Villanueva López, profesor de tecnología del Losada Diéguez es el gran culpable de que el centro esté en el este campeonato y será quien esté al frente de este proyecto. “Ser uno de los 18 que van a participar ya es muy importante. Esto no es por sorteo, es una selección. Hubo que cubrir muchas solicitudes en las que teníamos que demostrar que éramos merecedores de estar ahí y lo logramos”, afirmó. Villanueva considera que ahora, tanto él como los alumnos tienen un “reto tremendo” por delante que además les exigirá mucho trabajo extra. Esa exigencia a mayores reconoce que pesará a la hora de seleccionar a los nueve alumnos que formarán el equipo de trabajo para el campeonato. Según explica, los monitores que estuvieron ayer en A Estrada le darán alguna orientación sobre los niños con los que trabajaron y sus actitudes. Con esas premisas y siguiendo sus criterios terminará eligiendo a nueve. “Este proyecto es importante y exigirá en ocasiones trabajar por la tarde o los sábados. Dependerá mucho de la responsabilidad de los alumnos y también de su capacidad para trabajar en grupo”.