La Guardia Civil detuvo en la jornada de ayer al vecino de Forcarei cuyo perro apareció decapitado en un contenedor a comienzos de la pasada semana. Las fuerzas del orden llevaban días buscando a este vecino, conocido en el municipio por vivir como okupa en una vivienda de la calle Progreso. Se le acusa de un presunto caso de maltrato animal. Tras su localización y detención fue trasladado para prestar declaración sobre los hechos que se le imputan.

FARO recogía en sus páginas el pasado viernes este supuesto caso de maltrato animal, denunciado por varios vecinos de la zona tras encontrar al perro en la basura. En los días anteriores se habían escuchado los lamentos del can, por lo que temieron que se trataba de él cuando apareció una bolsa manchada de sangre en las inmediaciones de su vivienda. Este acto trascendió sin embargo mucho más allá, despertando las iras e incluso amenazas llegadas desde diferentes puntos de España.

La Guardia Civil comenzó a investigar los hechos tras conocer el caso, aunque más de una semana después seguían sin dar con el paradero del vecino, hasta ayer. La Benemérita recibió el aviso de la propia alcaldesa de Forcarei, Verónica Pichel, que se puso en contacto con ellos tras ver al supuesto maltratador por la calle. Fuerzas del puesto de Forcarei, junto a efectivos del Seprona y del cuartel de Lalín procedieron entonces a su detención. Su causa la lleva ahora el Juzgado de A Estrada.

Problemas vecinales

Cabe señalar que este vecino es muy conocido en Forcarei, aunque de manera negativa, especialmente desde que regresó a la localidad durante la pandemia tras muchos años viviendo fuera.

Desde su retorno protagonizó muchos incidentes y actualmente está acusado de causar destrozos en varios cajeros y en una vivienda. Además, mantiene una actitud hostil con los vecinos, que llegaron a recoger firmas pidiendo medidas para evitar una tragedia en el futuro.