El BNG de Lalín denuncia lo que considera claramente una pérdida de la calidad educativa en la mayor parte de los colegios del municipio, escenario que atribuye a “recortes” o “promesas incumplidas” de la consellería para incrementar los cuadros de personal con más profesores. Esta situación está generando malestar entre la comunidad educativa y en días podrían producirse algunos movimientos en este sentido.

El portavoz municipal de la formación nacionalista, Francisco Vilariño, explica que en el caso del CEIP Xesús Golmar –con 630 matrículas en el curso que acaba de arrancar– se amortizó una plaza de maestro y Educación tampoco atendió la solicitud de la dirección del centro de contar con dos especialistas más; un experto en pedagogía terapéutica y otro en audición y lenguaje. “Estamos hablando de un tema grave, pues son profesionales que atienden al alumnado con necesidades específicas”, manifiesta. En lo que respecta al CEIP Vicente Arias de la Maza de Vilatuxe garantiza que el departamento autonómico había prometido la incorporación de un maestro más para el área de infantil, pero esta incorporación no se hizo efectiva. Así, afirma que la consellería sí procedió al acondicionamiento de un aula y se envió el mobiliario, pero nada más, dando como resultado que el centro se viese forzado a juntar varias aulas de infantil.

El CEIP Varela Buxán de Cercio, aduce, es el único donde el cuadro de profesorado no varía, mientras que en la Escola de Educación Infantil (EEI) de Donramiro este curso está atendida por solo una profesora, cuando eran dos. Por último, en lo que atañe al CEIP Xoaquín Loriga de Prado, el portavoz del BNG lalinense indica que la consellería “quitó un profesor especialista en audición y lenguaje”, que ya no forma parte del cuadro de personal en este curso.

Al margen de los “recortes” de Educación en materia de personal anuncia quejas por el servicio de comedor del Golmar; protestas que podrían haber llegado incluso por escrito y centradas en una deficiente calidad de la comida que sirve una empresa de catering. Sin abandonar el colegio con más alumnos del municipio, Vilariño insiste en que la pobre calidad en la enseñanza se ejemplifica en la masificación existente en unas aulas ya de por sí de escaso tamaño. También apunta al gobierno local por su incapacidad para acometer las obras previstas y duda de que los patios cubiertos se vayan a construir para finales de año. Por eso, avanza, el BNG pedirá la dimisión de la edil Begoña Blanco en el próximo pleno.

“El profesorado, en general en todos los colegios hacen un esfuerzo, que ahora con los recortes del PP deberá ser todavía mayor, poniéndose en evidencia todas la carencias que tenemos en los centros”, alega. Para rematar cuestiona al titular de Educación, Román Rodríguez, por incumplir las promesas para los colegios de su localidad. “No queremos ser más que nadie, pero es una vergüenza que este conselleiro después tenga la caradura de venir a pedir el voto cuando hay unas elecciones”, sentencia.

Carencias en Piloño y el cierre de Merza

El BNG de Vila de Cruces censura lo que entiende como un abandono por parte de Concello y Xunta de la atención educativa. La formación de Álex Fiúza apunta que tras el cierre del CEIP de Merza “con un silencio sepulcral del gobierno municipal, que ya se vaticinaba desde hace años al no reclamar mejoras en servicios de conciliación como el comedor” ahora cita el CEIP de Piloño y el colegio de la capital municipal. Dice que en ambos casos muestran un estado de abandono por la desidia de ambas administraciones públicas. Así, demanda al alcalde, Luis Taboada, que solicite, de manera urgente, a Educación una reunión con la representación de todos los grupos de la corporación, para atajar las distintas problemáticas, como el pabellón del CEIP de Piloño, la instalación de las tuberías, el cambio de las ventas con amianto, el acceso a la pista deportiva, así como mejoras para el acceso a los centros, ya que la distancia que el alumnado tiene que recorrer es larga y se mojan cuando llueve. Por último, pide una negociación con la Xunta para la cesión de las instalaciones del centro de Merza.