El alcalde de Silleda, Manuel Cuiña, mantuvo ayer una reunión en la Consellería de Medio Ambiente, Territorio y Vivienda para abordar distintas cuestiones. En concreto, se entrevistó con la directora general de Calidade Ambiental, Sustentabilidade e Cambio Climático, María Sagrario Pérez Castellanos, y su subdirector para estudiar la recuperación integral de los terrenos que ocupa la Explotación Minera de Campomarzo, en la parroquia de Abades.

El regidor también se interesó por la situación del vertedero de residuos inertes de esta misma localidad, a fin de desatascar su situación, ahora con nueva empresa propietaria. Los responsables autonómicos le trasladaron que los informes técnicos no aprecian filtraciones contaminantes en la escombrera. Contradicen, así, la versión de expertos independientes que, como hacía días atrás el geógrafo Antonio Presas en estas mismas páginas, sostienen que las filtraciones existen y llegan hasta el río Toxa.

Planta de biorresiduos

Otra de las cuestiones planteadas en el encuentro, solicitado desde la Alcaldía de Silleda, fue el estado de los permisos y gestiones para la instalación de una planta de biorresiduos en el parque empresarial Área 33, a fin de licitar la dotación. Con esta instalación se busca reforzar la gestión y el tratamiento de residuos en el municipio, con una planta que tendrá capacidad para reconvertir en compost 1.200 kilogramos diarios.

El objetivo inicial es dar salida a los restos orgánicos que se producen a diario en establecimientos de hostelería, centros educativos, residencias y otras entidades, a fin de recuperar del modo más eficiente estos restos, además de reducir las emisiones de gases y poder reutilizar nuevos recursos naturales. Este modelo de economía circular plantea beneficios ambientales, económicos y sociales y permitirá cumplir con los objetivos de la Comisión Europea de reducir la eliminación de basura en vertederos y reciclar el 65% de los residuos municipales en el año 2030.

La materia orgánica constituye la fracción de mayor peso de los residuos urbanos. “Esta dotación supondrá un paso cualitativo en la gestión de los residuos, en la que venimos trabajando en los últimos años y en la que queremos seguir avanzando para lograr una mayor sostenibilidad”, declara el regidor.

Silleda es uno de los municipios gallegos que recibió el visto bueno del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico con este proyecto a través del Plan de Impulso al Medio Ambiente (PIMA). El importe concedido es de 189.020 euros, la cuantía más alta de los trece municipios gallegos beneficiarios de la convocatoria y la segunda más elevada de España. La inversión total asciende a 227.000 euros, ya contemplados en el presupuesto municipal de este año.

250.000 euros para la instalación de la red de calor en la nueva casa consistorial

El Consello da Xunta aprobó la firma de un convenio entre la Consellería de Presidencia, Xustiza e Deportes y el Concello de Silleda para realizar obras de mejora energética en la nueva casa consistorial. Al amparo de esta iniciativa, la Xunta destinará 249.515 euros a la instalación y adaptación del edificio a la red de calor con biomasa existente en la localidad. Constituye el 80% de la inversión prevista en el proyecto, que asciende a 303.000 euros. La actuación permitirá conectar la nueva sede municipal a la red District Heating ejecutada en los últimos años con fondos europeos Feader. El objetivo es garantizar un alto rendimiento energético en un edificio eminentemente solar y que apenas precisará energía para su funcionamiento. De este modo, se prevé una reducción de 19,33 toneladas de dióxido de carbono anuales. Según el proyecto de la obra, se instalará maquinaria específica, como intercambiadores de calor, bombas y unidades de renovación de aire, además de distintos sistemas, como suelo radiante, puntos de abastecimiento de agua caliente y climatización. Se habilitarán lugares para albergar las instalaciones y se realizarán obras de mejora del sistema de aislamiento térmico exterior.