La junta de gobierno local de Cruces celebrada este martes da cuenta de la comunicación presentada por Refuxio Merza SL en la que se manifiesta la voluntad de no prorrogar el contrato formalizado hace cuatro años, en 2018, para explotar un chiringuito en el área recreativa de A Carixa, una de las más visitadas de la comarca dezana. El contrato remataba este domingo, precisamente. Refuxio Merza abonaba por esta concesión un canon anual de 3.182 euros.

Desde el PP se indica que esta decisión de no continuar con el contrato se debe a la falta de mantenimiento que padece A Carixa. Los desbroces comenzaron días atrás, pese a que el buen tiempo lleva instalado varias semanas en Deza y el resto de Galicia. No en vano otra playa fluvial, la de Vilatuxe, en Lalín, ya está disponible para el baño desde el pasado 27 de mayo. El portavoz de los populares, Jesús Otero, recuerda que desde el pasado mes de noviembre e se insta de forma continuada al gobierno de Xuntos a que acometa la puesta a punto del alumbrado, tanto en la zona de ocio donde se encuentran estos chiringuitos que ahora (con la temporada de verano ya encima) habrá que volver a sacar a concurso, como en el área reservada para autocaravanas. De hecho, los usuarios de este tipo de vehículos ya optan por estacionar en el casco urbano de Vila de Cruces. Otero también lamenta que esté dada de baja la WiFi en esta playa fluvial.

Proyecto Nai Natura

En el área recreativa de A Carixa el PP había comprado en el verano de 2017 una finca, con casa incluida, por casi 139.000 euros. La parcela iba a funcionar como la sede de una campamento centrado en actividades formativas para escolares con la naturaleza como protagonista. El proyecto tenía por nombre Nai Natura y permitiría que los escolares pasasen un día entero en este enclave, para conocer de cerca el bosque de ribera y las especies ornitológicas de la zona. Como colofón, habría visitas a otros dos enclaves imprescindibles en cualquier visita a Deza: el poblado minero de Fontao y el monasterio de Carboeiro, ya en Silleda. La iniciativa incluso había sido presentada por Otero ante la Xunta. Hoy, casi cuatro años después, nada se sabe de un proyecto que dinamizaría, aún más, A Carixa.