El concejal de Obras de Lalín, José Cuñarro, asegura que la desafectación de un camino público en la parroquia de Goiás a favor de un tío de su compañera de gobierno, Begoña Blanco, es “un asunto perfectamente legal”. Añade que el vial, solicitado por “dos vecinos”, está sin uso desde hace más de veinte años y que el expediente siguió “un trámite administrativo normal” y fue refrendado por “varios informes favorables de los técnicos municipales”. Cuñarro lamenta “el oportunismo político” del portavoz del BNG, Francisco Vilariño, al “inventar una polémica sin fundamento y llevarla al terreno personal”.

El expediente se sometió a exposición pública durante un mes en los tablones de anuncios del local social de Goiás, de la iglesia parroquial y del Concello de Lalín, sin que se registrase ninguna reclamación ni alegación. “¿Por qué el portavoz nacionalista no reclamó cuanto estuvo en fase de exposición pública, que era el momento, en vez de hacerlo ahora tratando de armar ruído exclusivamente político?”, se pregunta Cuñarro.

El concejal delegado afirma que el proceso de desafectación de caminos es “un trámite habitual municipal” que sale adelante siempre que no haya reclamaciones de vecinos, como es el caso de éste, que no recibió “ni una sola alegación”. El camino en cuestión, que comunica la pista de Casas Novas a la iglesia de Goiás con la que va a Os Porcallos, está “intransitable, colonizado por zarzas y hierbas de otra naturaleza, totalmente en desuso”. “No justifica interés para la colectividad, por lo que procede la desafectación como bien de uso público de titularidad municipal”, tal como recogen los informes técnicos.

Por otra parte, Cuñarro precisa que el expediente es “totalmente legal, como acreditan los informes de los técnicos municipales” y que “no entra dentro de las competencias” de la concejala Begoña Blanco, “que no tomó parte en el proceso, puesto que ni siquiera es miembro de la junta de gobierno”. Sostiene que en este asunto “no hay nada raro”, por mucho que Vilariño “lo intente hacer creer”, porque si los grupos de la oposición votan en contra del expediente no se aprueba. “Por si no se documentó o no se dio cuenta –le dice–, para poder aprobar ese punto se requiere mayoría absoluta del número legal de miembros de la corporación, lo que significa que, al ausentarse Begoña Blanco y no valer en estos casos el voto de calidad del presidente, la desafectación del camino no puede ir adelante”. Así que se pregunta “dónde está la malicia” si es necesaria la oposición para poder aprobarlo. Recrimina al edil del Bloque su forma “mezquina y ruín” de hacer política y le recomienda dejar los temas personales al margen.