Recientemente el BNG de A Estrada hacía un llamamiento mediático instando al gobierno local a mejorar las condiciones de gestión del Novo Mercado de Abastos de la localidad, dado que las actuales, según apuntaba el partido de la oposición, habían repercutido negativamente sobre el consumo en este espacio.

Si una persona visita el Mercado de Abastos un lunes por la mañana percibirá que sólo hay dos puestos abiertos, uno de carnicería y otro de frutería y productos de la tierra. No obstante, y como manifiesta el propio Concello, en la actualidad hay un total de ocho puestos cedidos en esta ágora comercial: tres de productos de la tierra, una pescadería, una frutería, una carnicería y una panadería.

El motivo por el que, sin embargo, la mayor parte de la semana sólo están abiertos dos de estos ocho negocios tiene que ver con una cuestión de practicidad. Es decir, los restantes seis, excepto la floristería, que permanece cerrada por otras cuestiones de carácter temporal, están activos únicamente los días de “feira”, que en A Estrada serían los miércoles y los sábados, dado que son las dos jornadas en las que más volumen de gente visita las instalaciones, y por lo tanto en las que más rentable resulta vender.

Por lo tanto, el resto de la semana, el edificio del Novo Mercado funciona “a medio gas”. Esto hace que los comerciantes que sí continúan la actividad se sientan, en cierto modo, abandonados. Algunos de estos pequeños empresarios explican que la bajada en el consumo es evidente, y comparten que no sólo se debe a la falta de puestos o actividades que dinamicen la zona, sino que la actual crisis económica, marcada por la inflación, está siendo un revés difícil de sobrellevar, al igual que la apertura de grandes superficies comerciales como la del Lidle o la del futuro Mercadona.

Piden, por su parte, que los responsables políticos pongan en marcha más propuestas para ayudar a crear interés por parte de los vecinos en el mercado local y de proximidades, y conceden que cuando se trata de este tipo de espacios, cuanta más gente los visite, sea por los motivos que sea, mejor.

En este aspecto, el concelleiro de Promoción Económica, Óscar Durán, asegura estar “en contacto permanente” con la Asociación de Praceiros do Novo Mercado, Apranome, y mantener un fuerte compromiso con la plaza de abastos local. Prueba de ello son la puesta en marcha de iniciativas como la Feira do Mel, en el marco del programa Saborea A Estrada, que tendrá lugar el jueves y viernes de esta semana, o la segunda edición de la Feira dos Berries, en el mes de junio, y que se trata de una propuesta pionera en Galicia, ademas de “una importante promoción para los productores de la zona”.

Durán añade, además, de que “si bien en la degustación del Salmón, al ser domingo, no estaban abiertos los establecimientos del Mercado, siempre procuramos que los eventos que se llevan a cabo en este espacio sean en días de actividad, a poder ser los miércoles o los sábados”. Por último, el edil sentencia que no comprende a los que cuestionan el compromiso del gobierno local, mientras que los praceiros y praceiras de A Estrada sólo piden soluciones, y no convertirse en el centro de una disputa que finalmente se traduzca en rédito político, y nada más.

Abrir un puesto en la Plaza de Abastos


Como ya se mencionó anteriormente en el texto, actualmente existen 8 puestos cedidos en el Mercado de Abastos estradense. Pero todavía quedan más plazas por cubrir. Para ayudar a impulsar estos establecimientos, el Concello, junto con Apranome, acordaron permitir durante un número limitado de meses que las empresas interesadas hicieran uso de los cubículos de manera gratuita hasta comprobar su rentabilidad, pasando posteriormente a la licitación de la cesión en uso. Así, los interesados en abrir su propio puesto deben primero comunicarlo en el Consistorio. Luego, si desean seguir adelante, tendrán que pagar el alquiler mensual que los informes técnicos dictaminen, partiendo de la base de que el metro cuadrado en estas instalaciones tiene un precio de 10 euros. Asimismo, el Concello también está trabajando en un registro pormenorizado de los comerciantes y productos que alberga el Mercado, para asegurarse de que “cada uno vende lo que tiene que vender”, concreta Durán.