Si hay algo que uno nunca olvida, son los profesores que tuvo en su más tierna infancia. Y el CEIP Xoaquín Loriga, de Prado, puede presumir de que son ya unas cuantas generaciones de exalumnos y alumnas los que rememoran aquellos tiempos, porque cuenta ya con 50 años de funcionamiento.

Coloquio entre personas ligadas años atrás al colegio. | // BERNABÉ

El colegio celebró ayer este aniversario en compañía de las familias con estudiantes en el centro pero también con varias personas que a lo largo de estas cinco décadas mantuvieron algún vínculo con el centro. De hecho, el programa de actos arrancó con siete ponentes de distintos ámbitos, que recordaron ante alumnos, progenitores y docentes la relación que tuvieron con este colegio.

José Crespo, durante su intervención en el evento. | // BERNABÉ

Este entrañable coloquio dio paso a la actuación de un grupo musical y, posteriormente, a un baile grupal coordinado por una monitora de zumba. El broche de oro vino de la mano de una comida campestre en una carballeira. Las mesas estuvieron distribuidas por cursos, de modo que las familias con varios hijos tenían plaza reservada en aquella a la que pertenecía su vástago de menor edad. La velada remató al filo de las 15.00 horas, cuando tocó tomar el transporte de regreso a casa. Sobra decir que todas las actividades se realizaron siguiendo las pautas sanitarias para minimizar cualquier riesgo de contagio por coronavirus.

Exposición de fotografías

A la conmemoración del 50 aniversario del CEIP de Prado acudieron el alcalde de Lalín, José Crespo, y la concejala de Educación, Begoña Blanco, así como el jefe territorial de Educación, César Pérez Ares. A lo largo de toda la jornada, la comunidad educativa y las personas invitadas pudieron disfrutar de una exposición de fotografías antiguas que, para muchos, fue un viaje en el tiempo muy especial y emotivo.