En colaboración con el club de pesca deportiva Río Deza y la Consellería de Medio Ambiente, la Policía Autonómica sorprendió anteayer por la tarde a dos pescadores furtivos en el Coto de Carboeiro. Tras la llamada de un particular, los agentes de la Policía localizaron a los dos pescadores en el nuevo tramo ampliado del coto (entre la desembocadura del río Orza, en A Carixa, y la desembocadura del Toxa).

La captura que se incautó a los dos varones. CPD Río Deza.

Pese a que la zona está señalizada como coto de pesca sin muerte, los dos varones se adentraron en las aguas. Pero no fue ésta la única infracción: la temporada de pesca en el Coto de Carboeiro no comienza hasta el próximo domingo, 1 de mayo, al tratarse de aguas salmoneras, a diferencia de otros caudales, donde ya arrancó el pasado 20 de marzo. Y pese a los carteles de pesca sin muerte, los dos hombres infringieron el arte de pesca que se permite en este coto, porque en lugar de usar un anzuelo sin arponcillo (para no matar a las truchas) empleaban anzuelos con arpón. De hecho, la Policía Autonómica les incautó una captura.

No es la primera vez que se detectan pescadores furtivos en este coto. El presidente del club Río Deza, Miguel Montoto, explica que ya el año pasado se localizó a otro pescador, en verano, sin permiso de pesca y con capturas. Los dos identificados este domingo se enfrentan a sanciones cercanas a los 10.000 euros. Apuntaron que no eran de la zona.

Vertidos

De cara al arranque de la temporada, el 1 de mayo, el club de pesca sorteará los permisos, ocho, este viernes. Desde hace tiempo, los socios de la entidad ejercen labores de vigilancia sobre el cauce del río, para evitar tanto la presencia de pescadores furtivos como para alertar de vertidos en las aguas. El más reciente que llegó a aguas del Deza tuvo lugar a finales de marzo y se originó en el Asneiro, procedente de la depuradora del polígono de Botos.

Como en anteriores ocasiones, las aguas se cubrieron de espuma. Hay que recordar que el propio club presentó una denuncia, junto al colectivo AEMS-Ríos con Vida, por un vertido de esta misma depuradora, en julio del año pasado, cuyo impacto pudo comprobarse hasta en aguas del Ulla. Estos vertidos ya causaron diversas sanciones el Concello de Lalín, como una de 5.000 euros, notificada en 2020, por un vertido denunciado ya en julio de 2018. Augas de Galicia ya le había impuesto otra sanción de 2.500 euros por otro incidente similar acaecido en abril de 2017.