Lalín acogía ayer su primer feria del 2022, acompañada de una tregua al mal tiempo, que animó a muchos de los vecinos lalinenses a aventurarse a la calle para pasear por los diferentes puestos asentados en el Campo da Feira Vello, y en las calles anexas, Rosalía de Castro y Molinera.

A unos días de recibir la visita de los Reyes Magos, los habitantes de zona hacían ayer lunes sus últimas compras para despedir la época navideña. Desde puestos de ropa, a los tradicionales stans gastronómicos, e incluso algunos puestos con plantas, flores, y semillas en la urbanización de O Regueiriño, la oferta de productos no se vio menguada en esta primera jornada ferial del nuevo año.

Además, como también es habitual, los más animados pudieron disfrutar del pulpo á feira en el pulpeiro de siempre, así como de la ambientación musical que una gaiteira ofrecía en la calle, para poner música al inicio de ciclo.

No obstante, los habitantes de la capital del Deza que no pudieran asistir hoy al encuentro, todavía tienen otra oportunidad el 18.