La crisis de las materias primas parece estar llegando a la barra del bar. En los últimos días se colaba en el menú del día de la actualidad la constatación de cierta escasez en el suministro de conocidas marcas de ginebra, tequila o vodka. Tanto es así que se aseguraba que algunos hosteleros ya comenzaban a hacer acopio de cara a las celebraciones de Navidad. En este contexto, la marca estradense Rabiosa quiso tranquilizar ayer a los consumidores animándolos a ver más allá de los contenedores que se encarecen y se retrasan en el mundo de las importaciones. Sin miedo a esta suerte de “ley seca”, la firma gallega animó a aprovechar la coyuntura para confiar en los productos autóctonos.

Desde esta empresa, fundada en un entorno rural estradense, se hizo hincapié en que las dificultades de suministro de productos relacionados con el alcohol y procedentes de países extranjeros “son una buena ocasión para reflexionar sobre los problemas que puede acarrear una pandemia mundial como la que hemos vivido recientemente o cualquier otro desajuste derivado de los problemas de exportaciones o importaciones”.

“Esta empresa gallega quiere aprovechar este momento de incertidumbre para sensibilizar a los consumidores de la importancia que ten o ser consumidores de productos de proximidad y de calidad, donde se puede acceder con cierta facilidad al control y seguimiento de la elaboración”, apuntan desde Rabiosa. Añaden que, la apuesta por un consumo cercano consigue reducir las emisiones, con los correspondientes beneficios en materia medioambiental.

La empresa Biostore es propietarios de la marca Rabiosa, que actualmente produce diversas referencias de producto derivado de la manzana ecológica, como sidras, zumos, vinagres o ginebras. “A día de hoy no hay ninguna razón para consumir productos extranjeros frente a los productos gallegos de alta calidad”, defienden.