“Ningún empresario esperará un mínimo de tres años para asentarse en el polígono Lalín 2000 y eso provocará una pérdida de inversiones o que polígonos de otros concellos se beneficien”. Así resumió ayer el portavoz de Compromiso por Lalín, Rafael Cuíña, el anuncio del gobierno local relativo a la aprobación del plan de sectorización del área industrial y los plazos ofrecidos para la puesta en marcha de la cuarta fase. “Es una vergüenza que el Concello asuma esto y además que la ampliación se realice en tramos”, apostilló, en alusión a que la extensión del polígono se llevará a cabo por fases en función de la demanda. “Vamos a esperar, como mínimo hasta 2024 y luego, un año más hasta que se materialice cada ampliación”, remarcó.

Cuíña insiste en que los tiempos de los empresarios son distintos a los del ejecutivo de José Crespo y recordó como la paralización de la cuarta fase, durante su mandato, impidió que varias empresas pudiesen crecer. En este sentido acusó al PP de haber filtrado en su momento las sociedades que habían contactado con la Xunta para demandar suelo, entre las que se encontraba alguna de su familia, vulnerando la ley de protección de datos. En todo caso, dijo, se probó que entonces, cuando él aludió a que había empresas a las que les urgía suelo, no mentía. A su juicio es inaceptable que la Xunta defienda este modelo de ampliación, ligado a la demanda y con plazos tan amplios, y que el gobierno municipal comulgue sin rechistar. El exalcalde pidió a la Asociación de Empresarios de Deza (AED) un pronunciamiento público, máxime cuando en 2017, con el cuatripartito al frente del ayuntamiento, defendía la urgencia de que Lalín contase con suelo empresarial de manera urgente.

En otro orden de cosas, en su comparecencia también presentó una iniciativa que a su juicio puede ser beneficiosa para la dinamización de la economía. Pasa por la creación de una bolsa de alquiler en locales vacíos que, gestionada por el Concello, llevaría pareja ventajas fiscales o ayudas directas a aquellos que quisiesen iniciar una aventura emprendedora. Además de los bajos desocupados que hay en la actualidad vaticina que la crisis provocará más cierres de comercios.

Además, mostró su sorpresa por el retraso del proyecto de la Avenida Cuíña, una actuación del gobierno anterior que se demora mientras el firme de esta circunvalación está cada vez más deteriorado. En esta línea recordó el veto del PP en el pasado mandato a un plan de 400.000 euros para adecuar esta vía. Y aludió a la “paralización” del departamento de Urbanismo.

Noches sin vigilancia policial

Cuíña insta a la edil Eva Montoto a aclarar por qué en este mes la Policía Local solo hará servicio nocturno ocho días o por qué impidió a seis agentes realizar servicios en Monterroso. También cargó contra el edil de Deportes, Avelino Souto, por las devoluciones pendientes de los pagos en el Arena sin actividad para los usuarios o que a estas alturas no se sepa nada de las subvenciones a entidades deportivas. Y atacó al gobierno por aprobar dos trienios al funcionario Hervé Fernández mientras otros tuvieron que aguardar años.

Pulpada de 3.500 euros

Sobre el gasto público pidió explicaciones por una comida de 3.500 euros “en pulpo” para Feiradeza o acerca del enésimo contrato a una empresa de un edil del gobierno. Sobre el exasesor José Iglesias dijo no tener constancia de su nueva incorporación.