La Mancomunidade Terras do Deza celebrará este lunes a las 17.15 horas un pleno, en el se valorará el incremento de las aportaciones de los municipios integrantes. Sobre esta cuestión, el BNG reclama que se aclare si Agolada queda o no fuera de la entidad, tal y como acordó en el pleno municipal del pasado 5 de agosto.

“Por lo que tenemos entendido, la mancomunidad no acepta su marca por un defecto de forma en el acuerdo plenario, por lo que tienen que tomar otro acuerdo, y su marcha supondremos que será en enero de 2022”. La salida de Agolada implica que para el año que viene los cuatro concellos que quedan (Dozón abandonó la entidad en 2008) tendrán que asumir la parte que deja de abandonar el municipio agoladés.

Todo esto choca con el hecho de que según consta en el expediente del pleno, hubo en el presente mes dos juntas de gobierno local. Hubo que repetirla porque en la primera convocatoria no estuvo el regidor de Agolada, Luis Calvo, “suponemos que porque se sentía fuera de la mancomunidad”, apunta el Bloque. Pero si acudió a la segunda convocatoria “y por lo que consta en el expediente, también va a asumir el incremento de la aportación municipal”.

Ese incremento, a ojos del BNG, viene dado por unos presupuestos aprobados en diciembre del año pasado y que para el presidente, el cruceño Luis Taboada, “eran muy austeros y reflejaban la realidad”. El partido apunta que no solo eran austeros, sino deficitarios. Recuerda que las partidas de personal, mantenimiento y reparaciones no sufrían variación en comparación con 2020 pese a que Intervención ya alertaba de una posible subida salarial del 0,90%. Y en cuanto a los gastos previstos en reparación y mantenimiento, era de esperar que subiesen en comparación al ejercicio anterior “porque el parque de maquinaria consume muchos recursos, derivados de la antigüedad del mismo y de la carga de trabajo”. Por último, el BNG solicita que se les entreguen las actas de las juntas de gobierno local, en cumplimiento de la legislación vigente.