Nunca habían estado diez días en Lalín las atracciones de sus fiestas patronales. No obstante, este año los más pequeños pudieron disfrutarlas desde el pasado día 17 por la coincidencia con el día grande de la Feira do Cocido, el domingo. Ayer algunas de las barracas todavía funcionaron en una jornada de despedida, mientras que otras ya habían sido desmontadas en la noche del domingo o la mañana de ayer lunes.