El cardenal Antonio María Rouco Varela festejó el domingo el día de la Asunción de la Virgen María en Forcarei. Invitado por el joven párroco forcaricense, Damián Vidal Bouzas, el que fuera la máxima autoridad de la Iglesia española durante cuatro legislaturas –al presidir la Conferencia Episcopal Española de 1999 a 2005 y de 2008 a 2014– se encargó de presidir la celebración litúrgica en la iglesia de San Martiño de Forcarei.

Posteriormente, Rouco –catedrático de Derecho Canónico y miembro de la Real Academia de Doctores de España– se reunió con la directiva del colectivo “Forcarei, corazón de Galicia”, que fundó y preside el propio párroco forcaricense y de la que es secretario Manuel Colmenero Guzmán.

El también arzobispo emérito de Madrid se interesó por la situación eclesial y pastoral del municipio forcaricense así como por su demografía, mostrándose preocupado por la baja natalidad, el envejecimiento poblacional y la pérdida de población del municipio.

El sacerdote de Forcarei -por su juventud uno de los escasos sacerdotes que rompen con la creciente crisis vocacional sacerdotal– le explicó que la fundación de “Forcarei, corazón de Galicia” obedece a un intento de promocionar la cultura, el arte y el deporte así como de unir las parroquias en un municipio marcado por el predominio de la población mayor. Rouco valoró ese intento por “dar vida y esperanza a Forcarei”.

En la misma línea, valoró muy positivamente la ligazón jacobea local: el paso del Camiño da Geira e dos Arrieiros y del Camiño Miñoto Ribeiro por el municipio, considerando lo positivo que puede resultar para Forcarei y Terra de Montes no solo desde el punto de vista espiritual sino también como motor de crecimiento y desarrollo para Forcarei.

El sacerdote Damián Vidal valoró especialmente la visita de Rouco, subrayando que es un "día histórico" ya que “hacía muchos años que un cardenal no visitaba las tierras forcaricenses”. Solo le consta que lo hiciese Quiroga Palacios el 22 de julio de 1964 al bendecir la primera piedra de la iglesia de Santa María Magdalena de Soutelo de Montes.