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yolanda castro Reboredo | Profesora de yoga

“El yoga se ha vuelto comercial y sigue siendo desconocido”

“Las personas que lo practican son tanto cristianas como devotas de los miles de dioses de la India; nada que ver con una secta”

La lalinense Yolanda Castro Reboredo durante uno de sus paseos por O Candán.

La asociación vecinal de Catasós retoma su actividad, tras el parón del año pasado por el COVID-19, con clases de yoga, en la finca anexa a local social. La profesora es la lalinense Yolanda Castro, que comparte sus enseñanzas desde hace un par de semanas con una veintena de vecinos y vecinas. El colectivo anuncia aulas de gimnasia, restauración y meditación, durante las próximas semanas.

–¿Por qué se decidió a formarse como instructora de yoga?

–India fue para mí un amor-odio cuando estuve allí. Decidí hacer el curso de yoga porque tuve que gestionar una vivencia muy intensa para una mujer blanca y sola en ese país. Tengo que decir que no fue un objetivo, como le sucede a otra gente, porque yo entraba y salía del país cuando quería pero me surgió la oportunidad de formarme a un precio muy asequible en una entidad sin mucho renombre como otras escuelas de yoga durante un profundo mes de aprendizaje.

–¿Qué fue lo que le atrajo de una disciplina como esta?

–Llegó a mi en un momento crucial de mi vida. Vivimos a un ritmo tan apurado que siempre estamos en un pasado o en un futuro. Eso fue uno de los motivos pero también influyó que yo ejerciese como profesora de educación especial y me parecía una muy buena herramienta para potenciar fortalezas en niños con necesidades a nivel psíquico. Mi idea nunca ha sido ejercer de forma profesional. No dedicarme a eso pero poder impartirlo con las personas que considerase que tuvieran esa necesidad. .

–¿Cómo están yendo las clases en su tierra de Catasós?

–La verdad es que genial. Los mayores son un grupo sinceramente agradecido. Lo que más siento que les motiva de todo es ese tiempo-espacio exacto en el que estamos todos juntos disfrutando de ese presente. Al final, el yoga sigue siendo muy desconocido porque se ha vuelto comercial, que es algo que percibo después de haberme formado en India. Hay que tener en cuenta de que el yoga es la unión entre masculino y femenino, mente y cuerpo, y le objetivo es crear un equilibrio armonioso en todos los aspectos de la vida.

–¿Dónde radica la importancia actual de algo como el yoga?

–En el grupo tan amplio que tenemos en Catasós siempre tuve en cuenta desde el primer momento problemas óseos, musculares y demás de cada persona para que cada uno pueda encontrar las posturas más indicadas. Lo que decidí viendo que las mayores dolencias eran de la zona lumbar baja es que en cada sesión darles las herramientas para que después ellos puedan seguir practicando. Yo en lo que les insisto es que su cuerpo se vaya adaptando a los ejercicios sin forzar. Te puedo decir que están descubriendo músculos que no sabían ni que existían. Así que, imagínate si es importante el yoga para ellos.

–¿Es cierto que aprender a respirar es algo crucial en todo esto?

–Uno de los aspectos que para mí es fundamental es centrar la mente y la atención a la respiración. En muchos casos, nos enseñaron a respirar de hecho que cuando nos vemos agobiados parece que nos quedamos sin aire, como le pasa a un niño cuando llora de forma desconsolada. Las técnicas de respiración deberían de enseñarse desde muy pequeños. En general, respiramos muy mal.

–Asociamos el yoga a la relajación, ¿es real o sólo un paso más?

–En el grupo que tengo en Catasós disfrutan mucho la relajación final, fundamental para completar esa toma de conciencia con nuestro cuerpo después de haber hecho ejercicio físico y de superarnos a nosotros mismos. Cuando vuelvo a abrir los ojos y los veo a todos como en un estado tan bonito, no hay forma de pagarlo, la verdad.

–¿Por qué cree que todavía hay gente que percibe en el yoga componentes propias de una secta?

–No lo sé pero me parece increíble. El yoga es una práctica física que conlleva equilibrio entre el cuerpo y la mente. Las personas que practican yoga son tanto cristianas como devotas de los miles de dioses de la India, nada que ver con ninguna secta ni nada parecido.

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