La alegría de un niño el último día de clase no tiene comparación. El verano, con sus cálidas temperaturas, es sinónimo de dormir a pierna suelta, de olvidar la palabra deberes y de diversión. Sin embargo, aunque los escolares se quedan en casa, muchos padres tienen que seguir con su rutina de trabajo. Por ello, en los concellos de las comarcas se ofrecen diferentes propuestas lúdicas que favorezcan la conciliación. Así es que julio arranca al mismo tiempo que los campamentos de verano.
En A Estrada comenzaron tres de sus propuestas. El Campus Deportivo de Verán, el más numeroso, inició ayer sus actividades con más de 130 participantes en su primer turno, que se corresponde con la primera quincena de julio.
Así lo hizo, también, el campamento ofertado por el Concello y que se desarrolló tanto en el pabellón del CEIP Pérez Viondi como en los centros educativos del rural, que se concentran en Oca, Codeseda, Vea y O Foxo. De hecho, este último es uno de los campamentos más numerosos de todos los ofertados por el Concello de A Estrada, con casi una treintena de participantes. Por otro lado también arrancó la oferta del Recreo Cultural, que incluía desde deportes a otras actividades de entretenimiento.
En la comarca de Deza, Silleda también comenzó sus campamentos de verano en el casco urbano y en Bandeira. En este último participan un total de 30 niños durante el mes de julio. En lo que respecta al concello de Rodeiro, este también dio inicio ayer a su campamento urbano.