Faro de Vigo

Faro de Vigo

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Carabelo retoma su alhóndiga

El colectivo organiza en su sede el cuarto “Mercadillo Solidario” hasta el domingo

La cuarta edición del “Mercadillo Solidario” de Carabelo finaliza este domingo. | // BERNABÉ/ANA AGRA

El número 11 de la calle Luis González Taboada de Lalín es desde ayer la sede de un nuevo rastro de la Asociación Carabelo. De 11.00 a 14.00 horas, por la mañana, y de 18.00 a 20.00 horas, por la tarde, se podrán comprar o donar artículos nuevos o usados en una cita que se prolongará hasta el domingo. De todas formas, la presidenta de la asociación, Valentina Díaz Yacobazzo, recuerda que si algo quedara por vender o por recoger, los voluntarios de Carabelo atienden en su sede incluso después de la celebración de este rastrillo solidario.

“Que la gente se acerque a ver y si quiere comprar algo, genial, y si hay gente con donativos, se pueden acercar al local para dejarlos ahí mismo”, explica la responsable de esta asociación solidaria dezana. Díaz hace hincapié en que lo que se encuentra en el mercadillo está “en buen estado, como cosas de casa, libros, ropa, ropa para niños, juguetes junto a cosas que hacemos nosotros como bolsos de tela, mascarillas y demás”. La mandataria de Carabelo también recuerda que “el último mercadillo que hicimos fue en noviembre de 2019. Y lo hacemos para poder cuadrar nuestro presupuesto mensual que para nosotros es mucho. Hay que pagar el teléfono, los gastos de los niños, las meriendas y todo lo que hacemos. Para nosotros es algo fundamental”.

En cuanto a la actividad de Carabelo durante estos meses de pandemia, Valentina Díaz señala que “con la llegada del COVID decidimos priorizar con los mayores y los que tenían más necesidades. Luego, de a poco fuimos incorporando casi todos los cursos menos Infantil. Además, tenemos un problema de espacio en el local. Estamos cerca del medio centenar de niños en estos momentos”. Los responsables de Carabelo tuvieron que adaptarse a los nuevos tiempos víricos que tocan vivir para no dejar desatendidas a familias enteras necesitadas.

Voluntarios

A pesar de todo, el colectivo no deja de crecer, tal y como reconoce su presidenta: “En estos momentos estamos llegando a 35 o 40 familias. Trabajamos también con muchas madres solas o madres solteras. Intentamos apoyarlas en todos los sentidos. Curiosamente, este año hemos estado mejor en lo que a número de voluntarios se refiere. Incorporamos a varios voluntarios jóvenes nuevos y logramos llenar los huecos que teníamos. En estos momentos, tenemos alrededor de 15 voluntarios fijos y también gente que colabora con nosotros”.

Compartir el artículo

stats