El Concello de Lalín acometió con medios propios los trabajos de instalación de un vallado perimetral de madera en un tramo que se extiende desde la calle Ponte hasta Cidade Xardín. Es un tramo que presenta un riachuelo en sus cercanías y que suponía riesgo para el vecindario ya que al ser muy estrecho dificultaba las maniobras de los coches al salir de los garajes con el consiguiente peligro de precipitación al arroyo, así como también para algún viandante despistado. El edil José Cuñarro afirma que esta demanda fue recogida la semana pasada en una reunión con vecinos de este entorno.