Solo un contagio. Este es el balance del cribado al que fueron sometidos anteayer en el ambulatorio lalinense 130 vecinos de la parroquia de Barcia y su entorno para detectar posibles infectados por contacto con el entorno familiar del hombre de 55 años fallecido el jueves. Las autoridades sanitarias y municipales temían un posible brote en esta zona, que dispararía los casos en un municipio que en el día de ayer contaba con 39 activos (uno más en 24 horas) y con una incidencia acumulada a 14 días de 178 casos por cada 100.000 habitantes.
El balance de los test PCR, ya con el resultado de sus análisis, supone un respiro para el entorno de Barcia y el conjunto del término municipal que no es capaz de controlar por el momento la propagación del coronavirus SARS-CoV-2. La enfermedad se está propagando a causa, según las autoridades locales, de contactos familiares. El temor a brotes por positivos en miembros de colectivos sociales como Carabelo y Aspadeza también fue superado al no detectarse más casos entre ambas comunidades que los ya confirmados.
Volviendo Barcia, en el día de ayer trascendieron exactamente el número de convocados por Sanidade para la realización de las pruebas diagnósticas. Fueron en concreto 208 personas, pero solo acudieron 130; es decir, el muestreo se realizó sobre el 62,5% de los citados. Una vez más se pone de manifiesto que la colaboración vecinal debería ser mayor y salvo causa justificada no debería desatenderse la llamada para un cribado pues no solo está en riesgo la salud de quien hace oídos sordos al requerimiento sino la de la del conjunto de la sociedad.
Dando carpetazo a lo acontecido en esta parroquia, los próximos días serán cruciales para ver cómo evolucionan los contagios en el municipio, que precisamente hoy se sitúa en un nivel medio de restricciones. Las medidas de la Xunta, que también afectan a Silleda, afectan básicamente a la hostelería y solo puede disponer del 30% del aforo en el interior de sus negocios y el 50% en terrazas. Los bares mantienen en su horario de cierre en las nueve de la noche y los restaurantes pueden abrir hasta las 23.00 horas. Las reuniones: un máximo de 6 no convivientes en espacios al aire libre y 4 en interiores, tanto en domicilios particulares como en espacios públicos.
A Estrada, por su parte, solo tiene un caso activo y a estas alturas en el municipio ya se practicaron más pruebas de detección –20.770 desde el inicio de la pandemia– que habitantes tiene la capital de Tabeirós. De los 680 vecinos contagiados, 669 superaron la patología y hubo una decena de fallecidos.
Compromiso detecta carencias del centro de salud
Compromiso por Lalín se pronunció ayer sobre el operativo habilitado en el centro de salud para el cribado, haciéndose eco “del malestar de muchos vecinos ante lo que calificaron como una situación sanitariamente de riesgo”. Consideran, alega, que las pruebas se hicieron en condiciones poco adecuadas dentro del edificio donde se está vacunando a los ciudadanos con una deficiente ventilación. Asegura la formación de Rafael Cuíña que los propios trabajadores del ambulatorio transmitieron su “enfado y dicen no entender que se tenga una carpa fuera mientras el cribado se hace dentro”. También, garantiza, Protección Civil, GES o Policía Local “que todavía están sin vacunar”. ¿A qué se dedica exactamente Eva Montoto, supuesta concejala de Sanidade, ante esta situación además de hacer todo a posteriori y de forma chapucera?, se pregunta. Y apunta al edil Avelino Souto por “mandar mensajes a vecinos para que acudan a un cribado que no son capaces de coordinar con un mínimo de seguridad para las personas”.