A media tarde del viernes, una casa deshabitada de la parroquia lalinense de Cangas sufrió un voraz incendio que destruyó su estructura, dejando solo en pie las paredes. La casa era usada como almacén de aperos de labranza y cuadra de animales. Las reses fueron desalojadas a tiempo. En las tareas de extinción colaboraron Emerxencias Lalín, con el vehículo de intervención rápida que les entregó la Xunta esta semana, y los bomberos con sede en Silleda. Este servicio se desplazó ayer por la mañana al lugar para apagar posibles rescoldos del fuego.