José Taboada y Víctor Arias, de la empresa Tysgal, detectan al menos una treintena de incumplimientos en el proyecto del megaparque eólico Val do Folgoso y Monte dos Porcallos. Los dos expertos dieron a conocer ayer junto al alcalde de Lalín, José Crespo, un contrainforme ambiental que servirá para dar forma a la alegación de Lalín contra estos dos parques de Green Capital Development. El alegato se registrará a principios de la semana que viene y contará además con un informe jurídico de Gonzalo Abogados y otros dos elaborados por los técnicos municipales Javier Bugallo y Francisco Guerra, sobre urbanismo y afección agro-ganadera, respectivamente.

El megaparque se saltó el trámite del documento de inicio, que suele someterse a diversos informes sectoriales de la administración. Así es que el estudio de impacto ambiental, al eludir este trámite, presenta un grado tal de incumplimientos que ya lo harían inviable. Uno de los errores más notable es que hay tres molinillos situados sobre la circunvalación exterior que años atrás diseñó Fomento (y que aún está sin ejecutar) para unir Catasós desde la salida de la AG-53 y Lalín 2000, pasando por Goiás. Los tres aerogeneradores están en las inmediaciones de Alfonselle y Casares, y habría un cuarto muy cerca del vial, a la altura de Palmaz. En este sentido, Tysgal echa en falta que la promotora del eólico no facilite un fotomontaje para ver cómo quedaría la estructura. Y adelanta que ya solo con esta cuestión, habría que hacer un cambio significativo en el proyecto y volver a tramitarlo.

Molinillos visibles desde el casco urbano

Los aerogeneradores medirán 200 metros, así que serán visibles desde el casco urbano de Lalín, con el consiguiente impacto negativo sobre la hostelería, el turismo y las dos rutas jacobeas. En este punto, la empresa plantea soterrar la línea para minimizar la afección sobre el Camino de Invierno. En cualquier caso, toda la estructura del parque va a tener una afección visual de 34.457 hectáreas, según Tysgal, muy por encima de las ‘sólo’ 21.446 que calcula la promotora.

Esta diferencia de resultados entre el estudio de la promotora y el que elaboró Tysgal se ve también en el hecho de que Green Capital Development elude valorar el impacto de la línea de evacuación, que en sus 18 kilómetros de recorrido de Porcallos a Vila de Cruces pasará por masas de arbolado y núcleos. La LAT pasará por una aldea, Santón, que sí está habitada, en contra de lo que sostiene la promotora. Y esa línea impedirá que las fincas por donde discurra puedan ser construidas o reforestadas. Y, de paso, afectará a robledales del citado Santón, O Vento o Alemparte.

Y si hay tres molinillos sobre el vial de la circunvalación de Goiás, hay otros tres cuyas palas están por debajo de la distancia mínima de 500 metros a suelos de núcleo rural. Afectarán a las localidades de Porcallos, Pardesoa y A Corredoira. Lo justo sería mover los aerogeneradores hacia atrás entre 30 y 70 metros.

Contaminación acústica en Os Porcallos

La eólica mide distancias y contaminación acústica teniendo en cuenta la torre de los molinillos, pero Tysgal calcula las consecuencias incluyendo también sus palas. Y es lógico, ya que tendrán efectos a nivel acústico y de sombra. Así, los técnicos contratados por Lalín adelantan que en Os Porcallos, si el parque sigue adelante, va a superarse el límite legal de contaminación acústica, y esta misma aldea va a superar también el efecto parpadeo de sombra que causan las palas en movimiento.

Y si la promotora elude estudiar en profundidad el impacto de la línea de evacuación, también decide medir por separado el efecto sombra de los dos parques en Maceira y Froxán, para intentar atenuar este impacto. Así las cosas, el contra informe de Tysgal deja claro que el mepaparque no valora de forma correcta los impactos. Pero es que tampoco tiene en cuenta la economía local, basada en explotaciones agroganaderas que precisan de esas tierras, ni tampoco la calidad de vida de los habitantes. Si la distancia mínima fuese no de 500, sino de 1.000 metros, la gran mayoría de los molinillos ya estarían incumpliendo.

Taboada: “No lograrán corregir la degradación”

El estudio de impacto ambiental del megaparque eólico adolece de medidas para compensar el impacto en el paisaje y no aporta un estudio propio sobre la afección al sistema fluvial Ulla-Deza. Sus medidas ambientales “son muy genéricas”, indica José Taboada, hasta el punto de que “no lograrán corregir la degradación del medio. Tendría que haber medidas compensatorias como la reposición de valados o plantaciones de árboles”. Sí hay siembras de hierba, pero eso no compensará en absoluto la eliminación de masas arbóreas que precisa esta estructura.

El megaparque también se salta la exclusión de protección de cauces: el plan Sectorial de Galicia Costa indica que queda fuera del aprovechamiento eólico una franja de 100 metros de ancho, medidos horizontalmente desde el cauce. Y aquí hay varios molinillos en zona de policía de caudales. La promotora tampoco aporta medidas correctoras por sus consecuencias en el patrimonio cultural, a pesar de la cercanía de un vial al castro de Maceira o afecciones a los túmulos de Rodelas.

Crespo confía en el poder de la administración

Tysgal también recoge el incumpliendo del megaparque al diseñar molinillos fuera de las Áreas de Desarrollo Eólico (ADE) que marca el Plan Sectorial Eólico de Galicia. Es uno de los puntales a los que se agarra el alcalde, José Crespo, para que el proyecto no siga adelante. El regidor confía en la contundencia de la alegación del Concello, a la que se sumará la que presente la Xunta y las que remitan los vecinos afectados. “Nunca se dio el caso de que se hiciese un parque sin el visto bueno de la administración autonómica y la local”, recalcó. La alegación estará abierta a propuestas de la oposición.