Todos tenemos a una de esas mujeres en nuestras vidas. Duras por fuera y tiernas por dentro. Capaces de ponerse el mundo por montera y con manos curtidas en mil batallas. De esas que saben lo que es trabajar de sol a sol y echarse a la espalda el peso de una familia entera y seguir manteniéndose completamente erguidas. La Xunta rindió ayer homenaje a las mujeres rurales gallegas como colofón a la semana de actos vinculados al 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer. Fue a través de un acto organizado en Cerdedo-Cotobade por la Consellería de Emprego e Igualdade, un foro que permitió exaltar el papel de estas mujeres a lo largo de la historia de Galicia.

La titular del citado departamento autonómico, María Jesús Lorenzana, señaló que las mujeres rurales son ejemplo de “superación, resilencia y constancia”, incidiendo en que constituyen uno de los principales pilares que sostienen la identidad gallega. La conselleira de Traballo e Igualdade abogó por hacer el rural “más versátil” para poder aprovechar toda su potencialidad con las nuevas oportunidades en oficios y sectores que posibiliten a las mujeres –y también a los hombres– elegir el ámbito rural como medio de vida.

Por su parte, la conselleira do Mar, Rosa Quintana, tuvo palabras para subrayar la contribución de la mujer también en este ámbito a través de su trabajo en la producción pesquera, marisquera y acuícola, igual que tierra adentro lo hace con su labor en la agricultura y ganadería. Quintana subrayó que la figura femenina fue fundamental en el desarrollo de iniciativas innovadoras para la transformación de productos primarios y en el impulso del proyecto vital de Galicia, por lo que animó a seguir trabajando para dar a conocer el papel de las mujeres en todos los ámbitos de la sociedad.

Al acto asistieron también los secretarios xerais Inés Santé y José Balseiros, el alcalde de Cerdedo-Cotobade, Jorge Cubela, y representantes de distintos colectivos femeninos.